[FANFIC/AU] Sólo es un contrato (Jinx)

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Después de charlar con Yuko por varios minutos, Yujun insistió en que Dan jugara con él junto con Jaekyung mientras David atendía algunas cosas con el doctor y Yuko.

Después de jugar 8 circuitos de carreras, todos ganados por Dan, que no tenía alguna experiencia previa en videojuegos, él y el peleador se regresaron a la habitación de este último.

— ¿Podrías abrirte la camisola por favor? — dijo Dan, quién estaba en el baño mojando una toalla con agua fría.

— ¿Quieres tener sexo? — dijo burlonamente Jaekyung,

— Deja de pensar con tu pene por una vez ¿Quieres?— dijo Dan, con la toalla ya exprimida de exceso de agua, pero aún ligeramente empapada — Y no, tengo que tratar los moretones en tu torso.

Jaekyung volteó los ojos y empezó a desabotonarse la playera cuidadosamente de no lastimarse la mano canalizada.

Dan se acercó a la camilla y separó los dos pedazos de tela, dejando al descubierto el torso innegablemente bien definido del peleador, aunque parecía que unos moretones se querían formar, y tenía unos pequeños rastros de sangre, que cuyo probable remitente fue la nariz del luchador estadounidense.

— Solo muéstrame dónde te golpeó Hayes— dijo Dan, Jaekyung apuntó a su lado izquierdo debajo de la última costilla, lo aplicó con cuidado, recibió un pequeño quejido grave del peli azabache.

— Ahí es donde más me dolió, me sentí muy mal después del golpe, y eso rara vez ocurre — dijo Jaekyung sintiendo su piel erizarse, no le gustaba la sensación — ¿Es necesario que sea agua fría?

— Si no quieres unos moretones de mal aspecto en el torso del hombre más deseado de Corea sí, necesito el agua fría para reducir el dolor y que no se te entumezca tanto el músculo — dijo Dan, quien ahora estaba pasando la toalla por todo el torso del azabache, aunque batallaba para llegar al otro lado de done estaba

— ¿Por qué no te pones en mi regazo? Te resultará fácil llegar a algunas zonas.

— No lo haré, porque sé que un mínimo roce te provocará una erección, y el sexo en el hospital no es una de mis fantasías.

— Prometo que no tendré una erección, el sexo en el hospital tampoco es mi fetiche — dijo Jaekyung — siéntate en mi regazo, será más fácil para ti.

Para evitar que el menor estuviera de persistente, Dan se subió a la camilla, quedando su trasero con el pubis del mayor.

— Tampoco yo, tener sexo en el hospital se siente raro, y una persona al azar puede descubrir, y ya sabes, siempre tengo a los medios viniendo a por mí, odio eso de verdad — dijo Jaekyung quién ayudó un poco a Dan a ponérsele encima.

Por primera vez en todo el tiempo que se conocen, ambos hombres no tenían la necesidad de tener que estar en un ámbito sexual para encontrarse en esa posición.

Y aquí es cuando Jaekyung tiene algo de tiempo para admirar a Dan, ¿cómo puede él, un hombre mayor que él, tenerlo tan atontado y enamorado? Su piel almendrada, sus ojos de color miel, su hermoso y terso cabello castaño, y esa cara que parecía una escultura de la antigua Grecia, parecía un ángel.

También, aquí es cuando Jaekyung admite algunas cosas relacionadas con Kim Dan, el hombre al que una vez llamó puta y buscador de dinero, y al que golpeó sin piedad bajo la influencia, y del cual posiblemente jamás obtenga su perdón.

Dan lo tenía enamorado, no poco, lo tenía completamente flechado.

La mirada de Jaekyung coincidió nuevamente con la de Dan, e inconscientemente, una mano de Jaekyung se acercó al rostro de Dan, quien tembló un poco ante el toque del azabache, acunando el rostro del castaño en esta. Posteriormente, el menor se incorporó un poco más en la camilla, acercando ambos rostros, para finalmente besarlo. Y por primera vez en su vida, Jaekyung conoció después de 27 años de vida, la sensación de tener una percha de mil mariposas revoloteando en su estómago.

Dan se sentía algo sorprendido, no por el hecho de que Jaekyung lo haya besado, cosa que ya veía venir, sino que estaba completamente sorprendido por el hecho de que ahora el beso se sentía diferente, no era como los besos salvajes que solía darle, cargados de agresividad y un primitivo deseo físico, los labios del azabache se posaron delicadamente sobre los del castaño, y era delicado y suave. Y Jaekyung tenía los ojos completamente cerrados, cosa que no era común en él porque normalmente los tenía abiertos al besarse.

Alguien necesitaba pellizcar a Dan en el brazo, necesitaba saber si estaba despierto o todo esto era solo un mero producto de su imaginación, porque este no es el Joo Jaekyung que conoce, ¿qué pasó con el hombre de modales salvajes, arrogante, fanfarrón y egoísta que conocía?

Las mariposas que alguna vez llegó a sentir y que de vez en cuando aparecía, hicieron su triunfal regreso al estómago de Dan. Se activó una pequeña alarma en el hámster, había jurado que eliminaría todos los sentimientos románticos que tenía por Jaekyung

Jaekyung separó sus labios de los de Dan, mostrando que ahora la cara del azabache era la del potente sonrojo. De la vergüenza, el menor pegó su frente al pecho del castaño.

— Oh Dios, trágame tierra — dijo Jaekyung en un tono de voz suave — Yo, yo, yo simplemente no sé que acabo de hacer — dijo aún con la frente pegada al pecho de Dan.

— No mentiré, eso me sorprendió un poco — dijo Dan dejando a un lado la toalla — Es raro viniendo de ti.

— Lo sé, pero siento que a la vez no sé, solo sentí la necesidad de besarte así — dijo Jaekyung despegando su cara del pecho del mayor — A veces no me entiendo.

Dan posó su mano en el pecho de Jaekyung, y este podía sentir como el corazón de éste estaba palpitando como loco, parecía querer salirse de su caja torácica.

— Todavía me pregunto por qué mi corazón late como loco al tenerte cerca — dijo Jaekyung, algo avergonzado, no solía sentirse así.