[FANFIC/AU] Sólo es un contrato (Jinx)

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La sesión continuó hasta la tarde, las fotos del concepto de demonio buscaban capturar más la sensualidad y un lado más provocativo del luchador.

— Levanta un poco el suéter, muestra el abdomen... Perfecto... iluminación, necesito cambio del ángulo de luz, ahí, no te muevas, ¡perfecto!, ¡Ah sí! estas son las buenas, vale, empieza a quitarte el sueter por favor, Despacio, así...  En esa velocidad — decía el fotógrafo mientras sonaba el click de su cámara — perfecto.

Dan seguía monitoreando las fotografías desde el mismo monitor dónde checaba.

— Dan oppa ¿Nos recomiendas algo?

— Ah LeeJee, me asustas — dijo Dan con una mano en su pecho por el susto que le provocó la chica — ¿Porqué la pregunta?

— Es que noté tu cara, no te notas algo convencido con las fotografías — dijo LeeJee — Y pensé que si te gustaría darnos una recomendación o algo para que salga bien.

— Hmm... No sé... Ya está atardecien... Podrían ocupar una iluminación más... Cálida.

— Bien, ¡Lee Kwon Oppa! ¿Y si ocupamos una luz más cálida?

— Claro... Ayúdenme colocando las pantallas en los focos — dijo el fotógrafo.

Las pantallas de luz cálida estaban cerca de donde estaba Dan, así que el castaño se ofreció a ayudar a los asistentes de iluminación. Jaekyung veía como éste acomodaba con un poco de esfuerzo, y eso que era igual de alto que los chicos de iluminación. El como batallaba le causaba algo de ternura, y solamente se rió en silencio, y sin querer sonó el clic de la cámara.

— Ay, se tomó una foto, ¿qué capturó?

— Deje checo señor Lee — dijo Dan corriendo hacia donde estaba el monitor de la cámara, y ahí estaba, Jaekyung, que todavía tenía el suéter puesto aunque sin las mangas dentro de esta, dejando su abdomen y pecho izquierdo descubiertos, con una ligera sonrisa en sus labios, mirando hacia un lado de una forma algo sexy. Esto provocó un sonrojo en Dan, se veía demasiado atractivo — La foto... salió bien.

— Luego las checo, bien, ahora, continuemos.

Lapso de tiempo...

Después de terminar, Jaekyung se estaba quitando con una toallita húmeda, quitándose el aceite de su torso, y también quitándose el maquillaje de los tatuajes, aunque con un poco de esfuerzo, ya que no llegaba a una parte del brazo por lo ancha que es su espalda y lo grande de sus pectorales.

Dan estaba ya descolgando su abrigo de la barra donde estaban colgados los dos atuendos que Jaekyung ocupó. El azabache ya traía su pantalón de mezclilla puesto.

— Dan — dijo Jaekyung.

— ¿Sí?

— ¿Podrías por favor... Uhmm... ayudarme? — dijo Jaekyung con el paquete de toallitas en sus manos — No alcanzo.

— Sí.

Dan se acercó, tomando una toallita del paquete que tenía el azabache en sus manos y empezó a pasarla sobre la piel del brazo de Jaekyung, descubriendo gradualmente el tatuaje de dragón que tiene en ese brazo. El azabache solo miraba como el castaño iba pasando aquel cuadrito de tela de celulosa sobre su brazo.

La mano de Dan fue detenida por la mano desocupada de Jaekyung, que se posó sobre la de Dan, provocando un shock en el doctor. Aún con la toalla en la mano del castaño, el azabache dirigió hasta su pecho, Dan podía sentir como el corazón de Jaekyung estaba palpitando con mucha fuerza.

— Desde hace algunos meses, mi corazón ha estado latiendo así cada vez que estás cerca — dijo Jaekyung mirando a Dan, tenía esa mirada fría en su rostro nuevamente, por qué él era la única persona a la que Dan miraba así, se sentía celoso.

— Entonces… Ahora seré el culpable de que te de un infarto, supongo — dijo Dan comenzando a mover la toallita a su otra mano y pasarla por la mitad derecha de su torso.

— ¿Podrías dejar de usar ese tono conmigo? — dijo Jaekyung — Lo odio.

— Ja, ¿de casualidad tienes idea cuánto odio el tono que usabas conmigo?, no sabes cuánto me contuve de responderte cada vez que me regañabas, humillabas, insultabas — dijo Dan.

— ¿Y porqué no lo hiciste?

— Porque era una paliza segura hacia mí, y yo ya tenía suficiente con las palizas de los cobradores — dijo Dan seriamente.

Jaekyung, con la otra mano, posó la palma de esta sobre su pecho, también sentía el latir de Dan, este era también algo acelerado.

— No des un paso atrás — dijo Jaekyung — Quédate ahí.

Dan ya no pudo decir nada porque sintió los labios de Jaekyung sobre los suyos, pero el beso se sentía distinto a todos los demás, no estaba lleno de desesperación o deseo, era algo inexplicable, se podría decir que el beso era algo tierno. Y por primera vez en su vida, Jaekyung tuvo la sensación de mariposas en su estómago.

— No lo hagas por favor — dijo Jaekyung después de despegar sus labios de los del castaño.

Dan estaba confundido, no sabía que decir, así que solo se dispuso a terminar de limpiar el maquillaje del brazo de Jaekyung pero con otra toallita. Estaba anonadado.

— Parece que mientras más me intento alejar de tí por todo lo que me hiciste pasar, parece que me sigue atando a tí — dijo Dan que parecía estarse aguantando las ganas de soltar una que otra lágrima, Jaekyung era muy extraño — Y sobre eso... lo voy a pensar.

Después de limpiarle los brazos y parte del pecho, que se sentía suave el músculo, Jaekyung se puso la camiseta sin mangas y su chaqueta de cuero.

Dan ya con el abrigo puesto, salió primero del vestidor para hablar unas cosas con el fotógrafo mientras tenía en llamada al entrenador Park. Entre lo que había de opciones también para atuendos de Jaekyung, el azabache encontró un gorro que parecía tejido color vino, y se le vino a la cabeza Dan, con el atuendo que traía.

— Tú, LeeJee ¿no? — dijo Jaekyung hablándole a la chica, quien volteó al instante, asintiendo con la cabeza — ¿Cuánto por la gorra?

— Ah, no es mía señor Joo, cuando empezamos a montar el equipo ya estaba aquí, si quiere se la puede llevar.

— ¿De verdad? — dijo Jaekyung.

— Sí.

— Bueno, gracias por tu trabajo — Jaekyung hizo reverencia y también saliendo del vestidor con la gorra en la mano.

Después de hablar con el fotógrafo, Jaekyung y Dan salieron de aquella casa, tomaron rumbo hacia el auto de Jaekyung, ya estaba atardeciendo.

— Dan.

— ¿Sí?

— Quédate quieto — Jaekyung se acercó más a Dan, colocándole el gorro en la cabeza sin desacomodar su cabello, se veía tierno, y luego el sol estaba dando en los ojos de Dan, pintándose de un hermoso color miel. Aunque también los ojos de Jaekyung, se pintaron de marrón oscuro, casi negro.

— ¿Y este go...

— Te lo regalo, pero por ahora, hay que irnos — mencionó el azabache y sacó la llave del auto, abriendo las puertas para que ambos subieran y tomaran camino hacia algún destino.