Bleach: Comenzando Como Vasto Lorde

Capítulo 26: Celos

Está es una traduccion sacada de Webnovel, todos los derechos reservados a su autor original GloriousMilfHumter, si ahí algún error en la traducción háganmelo saber y trataré de corregirlo.
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Grifo. Grifo. Grifo. Los pasos resonaron a través de la cueva cuando su nuevo aliado, Cirucci, emergió de las profundidades sombrías, con su larga cola arrastrándose por el suelo como una serpiente. No pudo encontrar descanso con la charla que se arremolinaba en la cueva, así que salió a saludar a sus nuevos compañeros de equipo.

Los ojos de Cirucci se abrieron al ver la forma humana de Kazuya. "No puede ser–¿Kazuya? ¿Cómo te convertiste en humano?"

"Es una de mis habilidades".

La vaga respuesta de Kazuya quedó suspendida en el aire mientras se transformaba nuevamente en su forma Hollow. Con un hábil movimiento de muñeca, atravesó el tejido del espacio usando su habilidad Descorrer. La fisura negra se expandió, sus fauces abiertas parecían una bestia voraz, revelando un vacío abismal e infinito.

(N/A: Garganta cambió a Descorrer.)

El rostro de Kazuya se contrajo con inquietud mientras contemplaba la extensión ilimitada que conectaba todos los reinos de este mundo. "¿Qué estoy mirando?"

Mila Rose le dio un codazo en la costilla, su voz teñida de aprensión. "¿Estás seguro de que quieres ir allí?"

"No he estado allí".

"Yo tampoco."

Apacci y Sung-Sun confesaron su ignorancia sobre Garganta y sus peligros ocultos. Nunca tuvieron ningún deseo de explorar el Mundo Viviente e incurrir en la ira del Shinigami del Seireitei.

Kazuya se volvió hacia Harribel, la mayor y más sabia de ellos. "¿Tienes alguna experiencia con esto?"

Harribel negó con la cabeza, su cabello dorado rebotaba suavemente con su movimiento. "Puedo allanar el camino para ti. No sufrirás daño de esa manera"

Él inmediatamente rechazó su oferta, sintiendo su voluntad de sacrificarse por su causa. Era una figura materna verdaderamente admirable. Uno que no podía manejar en la situación actual.

Sin otra opción, Kazuya se acercó a la encantadora chica gótica y la agarró suavemente por los hombros. Cirucci no parecía tan hermosa en su maltrecha condición actual. "Cirucci~, ayuda a tu amigo, ¿quieres?"

Cirucci sintió un escalofrío recorriéndole la espalda. Su dulce y agradable voz bien podrian ser los susurros de un demonio.

"Joder", maldijo Cirucci en voz baja, lamentando sentir curiosidad por su conversación en su ausencia. "¿A donde quieres ir?"

Como Espada, había estado en el Mundo de los Vivientes en numerosas ocasiones. En lugar de mentir, decidió ayudarlo. Tenía que demostrar su valía como aliada, de lo contrario, él la consideraria inútil y la dejaría de lado. No podía permitir que eso sucediera bajo ninguna circunstancia.

Después de todo, su supervivencia dependía de él.

Sin darse cuenta de su confusión interior, él respondió: "El mundo de los vivos".

"¿Para hacer alarde de tu nueva forma?" La ceja de Cirucci se arqueó, su rostro reflejado en escepticismo. "Dame algo de tiempo. No tengo el Reiryoku necesario para llegar allí..."

Kazuya cerró la Garganta y le dio unas palmaditas en el hombro para tranquilizarla. "Descansa todo lo que quieras. Llámame cuando estés listo".

Cirucci partió hacia su lugar de descanso sin perder ni un segundo más.