Bleach: Comenzando Como Vasto Lorde

Capítulo 50: Una Bomba Nuclear Táctica

Está es una traduccion sacada de Webnovel, todos los derechos reservados a su autor original GloriousMilfHumter, si ahí algún error en la traducción háganmelo saber y trataré de corregirlo.
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Yoruichi observó al joven, la intriga brillando en sus ojos dorados. Shinigami (Alma) envejeció de manera extraña en la Sociedad de Almas, pero los humanos (Quincy) no eran famosos por su longevidad, al menos aquellos con los que ella estaba familiarizada. A pesar de no parecer mayor de veinticinco años, él manejaba un Reiryoku que rivalizaba con el de un Capitán de Clase; a ella le resultó dificil aceptar este hecho.

"¿Es él realmente el indicado?" La duda, desenmascarada y cruda, se apoderó de su voz mientras interrogaba a Kisuke. "No me estabas tomando el pelo con esto, ¿verdad?"

"No."

Las cejas de Kazuya se alzaron, un destello de sorpresa en sus ojos. "No pensé que a Urahara-san le gustaran los gatos que hablan. ¿Uno de tus locos inventos?"

Kisuke abrió el abanico de papel y ocultó su sonrisa. "Yoruichi-san es un gato natural que encontré en la mansión Shihōin. Algunos coños son irresistibles, dicen".

"¿Shihōin? No me digas que este es Yoruichi Shihōin..."

La más mínima ampliación de los ojos de Yoruichi delató su sorpresa. "Pareces bastante versado en nuestras costumbres. ¿Quién te explicó sobre el Seireitei? ¿Un amigo, un familiar o un extraño del otro lado?"

Saltándose las triviales bromas, se sumergió directamente en el meollo del asunto.

Antes de que Kazuya pudiera pronunciar una respuesta, Kisuke intervino suavemente: "Yoruichi-san, primero ofrezcamos un asiento a nuestro invitado. No quisiera que ningún rumor sobre mi tienda carezca de cortesía común".

Con un elegante movimiento de su pata, Yoruichi señaló un cojín colocado frente a ella. "Toma asiento."

Kazuya avanzó ante el suave empujón de Tessai, la puerta se cerró detrás de él.

"Relájense, muchachos", murmuró, sentándose tranquilamente bajo la intensa mirada de Yoruichi. "Revelaré todo, pero primero, deja de actuar como si estuviera aquí para robar tus dulces".

Kisuke no pudo evitar reírse. "Él te está diciendo que te relajes, Yoruichi-san."

Gruñó Yoruichi, dejando al descubierto sus colmillos felinos. "¿Qué? Estoy tan tranquila como el reflejo de la luna en un estanque en calma. Eres tú quien parece incómodo".

Desviar la culpa hacia Kazuya era una forma conveniente de restar importancia a su propia impaciencia.

En respuesta, Kazuya simplemente se encogió de hombros. "Urahara-san, prométeme un favor a cambio de mi información. Puedo garantizar que la información será útil en tu batalla en curso contra Aizen."

Kisuke hizo una pausa y se acarició la barbilla pensativamente. No era alguien que se endeudara fácilmente, pero había demasiado en juego como para descartar esta oferta. Si bien tenía fe en el poder de Yamamoto, dudaba que el Seireitei anticipara una amenaza de su capitán de aspecto más pacífico. Las cosas podrían llegar demasiado lejos cuando se den cuenta de su error.

Los experimentos de Hollowificación de Aizen y su Kyoka Sugetsu lo convirtieron en un comodín tan aterradora sus ojos.

Kisuke asintió con la cabeza. "Si está dentro de lo razonable, el siempre encantador y confiable Kisuke Urahara te echará una mano. Sólo una vez".

Yoruichi se giró para mirar a Kisuke, con un toque de advertencia en su tono mientras hablaba: "Cuidado con las promesas que haces".

Siendo una ex noble y ex comandante del 2.° Escuadrón, estaba bien familiarizada con personas que explotaban favores para sus propios fines maliciosos. Aunque no tomó a Kisuke como del tipo descuidado, persistía una nota de preocupación.

"Sé lo que estoy haciendo" Kisuke descartó sus preocupaciones con un gesto de su mano y un golpe juguetón en la mesa. "Ahora es el momento de que cumplas tu parte, Kazuya-san."

La fácil aceptación por parte de Kisuke fue una bola curva inesperada. Aún así, Kazuya se mantuvo estoico, todo negocios, sin lugar para la alegría.

"Sé mucho sobre Aizen porque... solía ser un Oficial Sentado al servicio de Aizen. Ni siquiera eso me protegió de convertirme en parte de su plan. Terminé enredado en su 'Hollowfication', consumido por un alma Hollow plantada en el mío"

Así, reveló el primer capítulo de su retorcida historia, una narración que habría sido imposible sin su metacomprensión de este mundo.

"E... Espera, ¿qué quieres decir con que moriste? ¿Es esto—"

"—Reencarnación", Kisuke concluyó la frase de Yoruichi, su rostro era una máscara de grave seriedad. "Una reencarnación defectuosa, donde el alma conserva sus recuerdos. Me he encontrado con algunos casos de este tipo durante mi estudio, aunque ninguno lo suficientemente significativo como para generar alarma".

Kisuke había profundizado en los confines más profundos de los archivos familiares de Shihōin, buscando el conocimiento más oscuro sobre el mundo espiritual, como que el dios Shinigami era un ancla de tres reinos, una cáscara de su antiguo yo. Un dios que fue masacrado por cinco familias nobles por temor a su poder.

Al ver a Kisuke sumido en sus pensamientos, Kazuya sonrió agradecido. Habia un placer innegable en compañía de mentes agudas que veían un significado profundo en las palabras más absurdas.

'Es fácil mentir con los genios'

Se cruzó de brazos y asintió con la cabeza. "Exactamente. Me reencarné como un Hollow."

Su audaz declaración pretendía ser una bomba nuclear calculada en sus mentes, para provocar una reacción. Esperó sus respuestas con un brillo travieso en sus ojos. Incluso en circunstancias extremas, su espíritu embaucador natural no podía ser reprimido.

Kisuke permaneció sereno, arqueando las cejas con desconcertado interés ante la escandalosa afirmación. En marcado contraste, Yoruichi reaccionó como una tormenta: siseando, sus pupilas encogiéndose hasta convertirse en pinchazos, su cola erguida por la agitación. Parecía lista para destrozarle la cara con sus garras.

"Incluso un Shinigami ciego puede distinguir entre un Quincy y un Hollow. ¡¿Nos tomas por tontos?!"

Su historia de traición la dejó fascinada hasta que él destrozó la ilusión con una afirmación extravagantemente falsa. Como ex Shinigami, conocía muy bien las complejidades de las almas y el delicado equilibrio de los reinos. La noción de un alma reencarnando con sus recuerdos estaba dentro del ámbito de la plausibilidad, pero ¿Un Quincy que afirmaba ser un Hollow? Eso fue nada menos que ridículo.

"Tranquilo, Yoruichi-san", imploró Kisuke con un gesto calmante y miró a Kazuya. "Yoruichi-san no es conocida por su paciencia sino por sus crueles acciones como comandante de Onmitsukido. Kazuya-san, no podré detenerla si no me das una explicación razonable".

Sin darse cuenta, Kisuke y Yoruichi habían caído en la eterna dinámica del 'policía bueno, policía malo'.

Kazuya tomó tranquilamente la taza de té bajo la tranquila mirada de Yoruichi. "Tenia la intención de explicarme, pero Shihōin-san me interrumpió. Dejemos eso a un lado por ahora. Urahara-san, ¿esta casa puede ocultar Reiatsu? Lo que estoy a punto de hacer puede alarmar a Quincy y Shinigami por igual".

"Puede", dijo Yoruichi y se levantó, caminando hacia la puerta. "Ya no tengo ningún interés en tus mentiras."

Justo cuando iba a abrir la puerta, se detuvo como si la hubiera alcanzado un rayo. El Reiatsu de un Hollow, más poderoso que el suyo, captó su atención como un vicio.

Al girarse, vio a Kazuya rodeado por un Reiatsu azul cielo. Aunque no podía ver su rostro desde su posición, podía ver los cuernos que salían de un lado de su cabeza.

Miró por encima del hombro, sonriendo después de darles la sorpresa de su vida. "Shihōin-san, ¿me crees ahora?"