Un verdadero amor 6a parte.

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Capítulo 1125

'¿Qué están haciendo estos dos chicos?', pensó KyuJong mientras miraba su teléfono desconcertado al ver que de repente le habían colgado.

Sacudió la cabeza y no pudo evitar poner los ojos en blanco. Había temido que discutieran o pelearan entre ellos cuando él no estaba en casa, pero parecía que cada uno tenía sus propios asuntos que atender y poco importaba si él estaba allí o no. En cualquier caso, fue bueno ver que ambos tenían algo que hacer.

KyuJong sonrió impotente. Decidió llamar a HongKi más tarde, a pesar de que deseaba desesperadamente escuchar su voz. La razón por la que quería hablar con él era para informarle que tenía una misión esta noche, y que no podría llegar a casa a tiempo. Lo que no esperaba era que no pudiera contactarlo la primera vez que intentaba informarle algo así en su papel de esposo.

"¡Disculpe, Mayor General! ¿Puedo pasar?"
Justo entonces, la voz aguda de Lee sonó repentinamente desde afuera. Como siempre, Lee se mostraba tranquilo y cortés, incluso durante estos momentos en los que estaban tan ocupados.

"Entra por favor".
KyuJong dejó el teléfono y se recostó contra la silla. Decidió olvidar todas sus preocupaciones sin importancia y concentrarse en la misión en cuestión. Se preguntaba por qué Lee había irrumpido de esa manera en su oficina.

"Mayor General, el Comandante quiere verlo de inmediato. Dijo que era una emergencia".
Lee era una persona muy disciplinada, en gran parte debido a pertenecer al ejército. No había en él ni un solo rastro de la más pequeña muestra de indisciplina en sus acciones, y siempre era un modelo a seguir para los nuevos soldados. KyuJong se irguió en su asiento inmediatamente al oír sus palabras.

"Oh ya veo. Voy de inmediato".
KyuJong frunció el ceño, preguntándose qué tipo de emergencia podía ser. No perdió más tiempo pensando y se levantó, estirando su uniforme militar antes de salir por la puerta de su oficina.

"Comandante, ¿qué pasa? Me han dicho que hay una emergencia".
Dijo al entrar a la oficina de su superior rápidamente. No podía evitar preguntarse si la emergencia de la que se hablaba estaba relacionada con el trabajo de esa noche.

"Un momento. Vamos a esperar a Saeng, ya que he pedido que venga también. No debe tardar en llegar. Quiero hablar con los dos a la vez".
Antes de que el Comandante terminara de hablar, la figura fría de Saeng apareció en la puerta, y se acercó a ellos con pasos apresurados. Era obvio que también se había apurado en venir después de recibir el mensaje del Comandante.

"Comandante, Me dijeron que hay una emergencia".
Preguntó en su habitual tono frío y distante, la misma frialdad que caracterizaba a su personalidad.

"Sí, sí. Qué bueno que ambos hayan podido venir tan rápido. Tengo una tarea para ustedes dos. Como sabrán, estamos planeando ayudar en un caso internacional que ha salido a la luz recientemente. Hemos recibido nueva información sobre ello, y esto significa que debemos cambiar nuestro plan original, hay que hacer modificaciones. Los criminales ya han aparecido, mucho antes de lo que esperábamos. Como todavía es de día, les propongo que se hagan pasar como una pareja de novios para acercarse a ellos. Una vez que lo hayan conseguido, hagan lo que tengan que hacer sin lastimar a inocentes. No sé si este plan les parece difícil o no".
Los agudos ojos del Comandante observaron de un lado a otro entre sus soldados. Su mirada parecía insegura, como si tuviera dudas de que sus excelentes subordinados pudieran completar esta peligrosa e inesperada misión con éxito.

"¿De cuántos objetivos estamos hablando? ¿Hay más información sobre estos delincuentes? ¿Cuáles son sus fortalezas y debilidades? ¿Tienen armas de fuego?"
Saeng no le dio una respuesta directa de inmediato. A medida que iba evaluando la situación, las preguntas empezaban a inundar su mente, mucho antes de decirlas en voz alta. Necesitaba tener una idea general sobre esta tarea.

Saeng no participaba en el plan de acción original y no sabía nada al respecto. Sin embargo, estaba obligado a cumplir con su deber como soldado y no podía decir que no a ninguna misión que le asignaran. Por lo tanto, para garantizar el éxito, debía conocer todo los detalles para poder actuar de la mejor manera posible. Al igual que el viejo dicho: "Si te conoces a ti mismo y a tu enemigo, nunca perderás una batalla".

"Exacto. Si tenemos más información, obtendremos la ventaja inicial. Desafortunadamente, no tenemos mucha información sobre los objetivos. Es por eso que la Interpol quiere nuestra ayuda".
Respondió el Comandante con seriedad mientras fruncía los labios y entrelazaba los dedos. Al escuchar esto, KyuJong y Saeng guardaron un largo silencio.

Sus cerebros se apresuraron a idear posibles planes de acción para la misión, pero antes de que pudieran elaborar cualquier propuesta, la voz del Comandante volvió a sonar repentinamente, rompiendo el silencio, para decirles a sus subordinados:

"Lo que sí es seguro es que hay cinco objetivos y son muy hábiles. Lo más importante, todos tienen en su poder armas de fuego. Esto es importante que lo sepan".

Los dos presentes en la sala pusieron los ojos en blanco cuando el Comandante terminó de hablar. Esa última frase respondía la mayoría de sus preguntas.

'No mucha información sobre los objetivos', ¿fue eso lo que dijo el viejo? Resultó que el Comandante los estaba engañando con sus miradas inciertas y su tono despistado. Saeng y KyuJong se quedaron mudos. Estaban acostumbrados a su estilo, pero lo habían olvidado justo ahora.

KyuJong se recuperó rápidamente y preguntó: "¿Esto significa que sus planes también se han adelantado? ¿Dónde harán el trato? ¿Tenemos la dirección? ¿Dónde están ahora?"
KyuJong no pudo evitar bombardear al Comandante con todas las interrogantes que se le vinieron a la mente. Él sí estaba al tanto del plan anterior y podía vincular rápidamente la situación actual con la información que ya había recibido.

"El lugar donde planean realizar el trato no ha cambiado, solo la hora. Debemos esforzarnos por cooperar con la Interpol y no decepcionar a nuestros amigos internacionales, ya que lo último que queremos es que nos traten con desprecio. ¿De acuerdo?"
El Comandante miró fijamente a sus dos soldados más destacados de toda la base. Tenía absoluta confianza en sus habilidades.

"Sí señor. Sin embargo, hay algo que no logro comprender. La Interpol ha enviado muchos policías para resolver este caso. Aun así siguen necesitando nuestro apoyo. ¿Por qué? ¿Por qué no pudieron obtener más información?"
KyuJong estaba de alguna manera perplejo. ¿Estaba la Interpol diciendo todo lo que sabían, o había algo más grande detrás de este caso que no compartían con ellos?