💚1152💚

26 12 2
                                    

Capítulo 1152

"¡SunMin! ¡También te extrañé tanto!"
Dijo HongKi en voz alta, ignorando completamente la sarcástica crítica de su hermano. ¿Qué más daba lo que había dicho? Solo le importaba que era su hermano y que lo amaba.

Apresuradamente soltó a ShangGuan y saltó a los brazos de SunMin. Sonreía ampliamente, mientras estrujaba a su hermano con fuerza. Sus ojos estaban llenos de alegría y no podía estar más feliz en ese momento.

"¡Mmmm! ¿Me extrañas? Lo dudo. ¿Hubieras venido a verme esta noche si no te lo hubiera pedido?"
Dijo SunMin con cierta indiferencia. Parecía que hubiera decidido estar enfadado con él por un rato. Pues quería enseñarle una lección.

"De acuerdo. Todo ha sido mi culpa. ¿Me podrías perdonar por esta vez, hermano? Por favor, solo mira mis ojos. ¿Puedes ver que mis disculpas son sinceras?"
HongKi miró a SunMin directamente, haciendo contacto visual de forma inmediata. Y le lanzó una mirada de cachorro triste, mientras parpadeaba un par de veces. Actuaba como un niño triste y descuidado. Era tan obvio que se comportaba de esta forma para ganarse la simpatía de su hermano, pero la pregunta era, ¿funcionaría con SunMin?

"¡Jaja! ¿A eso le llamas sinceridad? ¿Quién te va a creer eso, Kikí?"
ShangGuan interrumpió de forma burlona. No pudo evitar reírse a carcajadas al ver la tierna expresión del chico.

ShangGuan sabía que debería ayudar a HongKi, ya que era su cuñado. Sin embargo, eligió hablarle con franqueza. Parecía que la estrategia de HongKi no estaba obteniendo ningún resultado de todas formas, o al menos no para ShangGuan.

HongKi se veía lindo, pero no sincero. Así que su esfuerzo por ganar la simpatía de SunMin había sido en vano, al menos en parte, y el resultado estuvo lejos de ser el ideal.

"¡Oh! ¡Vamos, Shang! ¿Que no eres mi cuñado? Se supone que deberías ayudarme con esto. ¿De dónde sacaste el coraje para ponerme las cosas más difíciles? ¿De qué lado estás?"
HongKi hizo un puchero de disgusto, mientras hablaba con frustración. Que ShangGuan no lo estuviera ayudando ya era bastante malo. Sin embargo, que fuera así de directo era peor.

¡Cómo deseaba en ese momento cerrar la honesta boca de su cuñado! Pues realmente quería que SunMin no le reprochara, pero nada parecía funcionar.

'¡Qué mundo tan espantoso! Ya nadie me quiere ni me apoya. Incluso ShangGuan se burla de mí. ¿Dónde quedó el amor, chicos?', pensó, decepcionado.

"¡De acuerdo, muy bien! Continúen, prometo no decir una sola palabra de ahora en adelante. Vamos a ver si tu hermano te cree y te perdona. Después de todo, ha estado pensando y hablando de su hermanito todos los días. Se encontraba preocupado de si te estarías alimentando bien y si iría bien abrigado, ya sabes lo mucho que le importas, pero tú, ni nos hiciste una sola llamada o mensaje. No has visto a tu hermano desde hace mucho tiempo. Va a ser difícil que no se enoje contigo, permíteme decirte algo primero, esta vez no podrás escapar de él".
Dijo Shang y luego sacudió la cabeza. La relación entre HongKi y SunMin era compleja. Incluso había momentos en que a ShangGuan le resultaba difícil entenderlos. Él se preocupaba demasiado por su hermano, era sobreprotector y exagerado. Aún le sorprendía que incluso luego de casarse y después de tanto tiempo, continuara preocupándose así por HongKi.

Sin embargo, su marido también vivía en una contradicción constante. Puesto que incluso habiéndolo extrañado locamente, jamás tuvo la iniciativa de llamarlo. Aún esperaba que su querido hermano lo hiciera primero. Así fue cómo comenzaron sus problemas. Y a él no le gustaba verlos así. Si tan solo pudiera hacer algo al respecto...

"Hermanito, SunMin, Sr. Frío, Sr. Guapo, anda, mírame. ¿No ves lo delgado que estoy porque te echaba de menos y apenas tenía apetito?"
HongKi, fingiendo dar pena, intentaba ganarse el corazón de su hermano. Y este había sido su último recurso para reparar el vulnerable y roto orgullo de SunMin. No se le ocurría nada más que pudiera hacer. Estaba rezando para que lo mirara, cuando inesperadamente Manuel escupió el té que acababa de beber al oír lo que su hijo había dicho.

"Papá, ¿te encuentras bien?"
Preguntó Shang con cierta sorpresa, mientras sacaba una toalla de papel y se lo entregaba a su suegro. Se encontraba preocupado de que pudiera haber algo mal con su salud.

"¡Ejem! No te preocupes Estoy bien".
Respondió Manuel mientras tosía para tratar de no ahogarse con el agua. Había estado tratando de contener la risa cuando se atragantó. Estaba sonriendo sutilmente, lanzándole una mirada a su impredecible hijo.

¿No acababa de decirle que había comido bien y subido de peso? ¡Incluso había dicho que su rostro era más redondo que antes! ¿Cómo se volvió más delgado y perdió el apetito en cuestión de minutos? ¿Acaso se creía un globo? ¿Qué le pasó a su hijo mientras hablaba con su hermano?

Obviamente estaba mintiendo descaradamente. Por supuesto, HongKi sabía por qué su padre había escupido el té. Lo que acababa de decir contradecía por completo lo que le había dicho a su padre antes. De todos modos, ambas eran bromas y nadie debería tomarlas demasiado en serio. Por lo tanto, él siguió guiñándole el ojo a Manuel para que se callara.

ShangGuan ya lo había delatado una vez, no podía permitirse que su papá hiciera lo mismo. Sin embargo, tuvo suerte ya que Manuel recuperó la compostura en un instante y pudo contener la risa.

HongKi sabía que SunMin no estaba realmente. Sin embargo, también sabía que sería imposible calmar la ira del Sr. Frío una vez que este se enojara de verdad. Realmente no quería eso.

Mientras tanto, KyuJin se quedó inmóvil en su lugar ya que solo podía mirar a HongKi de forma inexpresiva. Sentía que cada vez conocía menos a su cuñado esta noche. El HongKi que estaba con él ahora no era el mismo que había conocido. ¿Era este el verdadero HongKi?

KyuJin pensó que realmente nunca había intentado saber nada sobre su cuñado. Ya que podía actuar tan libre y despreocupado ante su familia y amigos íntimos, a quienes amaba y por los que se preocupaba.

Podría ser ingenioso en ocasiones, pero también era inteligente, dulce, pícaro al mismo tiempo. A veces era travieso y malicioso; y en ocasiones era sencillo y puro; pero también solía ser sofisticado e inteligente. Además podía ser ingenioso e ingenuo a la vez.

Era una completa contradicción, tenía de todo un poco, lo que era imposible para cualquier otra persona. Sin embargo, era ese lado de HongKi el que más había confundido a KyuJin aquella noche. Y realmente necesitaría tomarlo en cuenta.

Un verdadero amor 6a parte.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora