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Capítulo 1190

"¿Quiere decir que me hizo pasar por todo eso para que mejorara como persona?"
Le preguntó KimBum. La verdad era que desde hacía tiempo había sentido curiosidad al respecto, pues siempre tenía que hacer las cosas una y otra vez hasta que su superior considerara que estaban perfectas. Por un momento llegó a pensar que era por su mala reputación, pero ahora sabía que KyuJong había tenido algo que ver con eso.

"Te exigí que dieras lo mejor de ti para que pudieras aprender y crecer, y así le demostraras a todos aquí de lo que estás hecho. En vez de culpar eternamente a Saeng, aprendiste la lección y te hiciste cargo de tu carrera".
Eso era todo lo que KyuJong podía hacer para ayudarlo realmente. Si bien KimBum tuvo que luchar contra su mala reputación, le dio la oportunidad de redimirse y confiaba en que él podía lograr lo que se propusiera.

"Realmente valoro mucho que ustedes me hayan recomendado, a pesar de todo lo que haya pasado".
Ya era un hombre maduro, por más que lo intentara, si empezaba de cero, nunca volvería a recuperar su rango. Pero, con la ayuda de KyuJong, el panorama podía ser distinto.

"No es un secreto que todos cometemos errores; lo que queda es aprender de ellos y salir adelante".
KyuJong suspiró profundamente luego de su reflexión, parecía que la gente nunca aprendía sino a los golpes. Si KimBum hubiese hecho lo que se suponía que tenía que hacer, ahora estaría en una mejor posición.

"Sí, es muy cierto. Honestamente, me arrepiento mucho de lo que hice, pero entiendo lo importante que es esta oportunidad para mí; le juro que si confió en mí para esta misión, no le fallaré".
Dijo, con firmeza y confianza. Su error lo había convertido en una persona humilde y cuidadosa, abandonando por completo su altivez y arrogancia. Ahora era su momento de demostrar quién era realmente.

"Como te dije anteriormente, nadie es perfecto; pero tenemos la oportunidad de aprender y hacer lo correcto. Tan solo da lo mejor de ti".
Le aconsejó mirándolo reflexivamente.

El ejército era una institución reconocida por su competencia, por lo cual él no hubiese permanecido allí si era mediocre en su proceder. Además, era un soldado muy capaz, probablemente incluso mejor dotado que la mayoría.

"Gracias por el consejo, le aseguro que nunca lo olvidaré. ¡Con su permiso, señor!"
Dijo KimBum, levantando la mano para hacer un saludo militar. Estaba lleno de gratitud y admiración.

"¡Así es! ¡Ve por ellos, soldado! ¡Adelante!"
Le dijo KyuJong, respondiendo a su saludo, y dejándole en claro que ya podía retirarse. A pesar de que era el superior de KimBum, era mucho más joven que él, así que le tuvo consideración.

En ese instante, recordó que HongKi lo había llamado anteriormente, así que pensó en él y decidió llamarlo de nuevo. Reconoció que había sido un tanto brusco al mediodía. La verdad es que no había querido lastimarlo, pero su esposo era muy sensible y sabía que le debía una explicación.

HongKi estaba de camino a su habitación cuando escuchó el teléfono. Al ver que era KyuJong quien lo llamaba, se sintió confundido. ¿Por qué? Él nunca lo hacía a menos de que fuera algo urgente.

¿Acaso había pasado algo? ¿Iba tener que abandonar sus planes de esa noche? ¿O era algo más?

"¡Hola! Soy yo".
HongKi se sentó en el borde de la cama mientras con una mano sostenía su teléfono y con la otra se quitaba la bufanda.

"Sé que eres tú, cariño. ¿Ya estás en casa?"
Dijo KyuJong con una sonrisa que le suavizó en rostro. Era obvio que estaba enamorado de su esposo.

"¡Sí! Justo acabo de llegar. Por cierto, Jin está aquí conmigo".
Respondió rápidamente. Era algo común que él se pusiera nervioso cuando hablaba con su esposo. Realmente se preocupaba por su relación y quería evitar cualquier malentendido, por eso sonaba un tanto ansioso.

"¿Llegó a decirte en dónde estaba?"
Preguntó. Lo dijo al azar al escuchar la mención de KyuJin, no porque necesariamente le interesara demasiado. Pero HongKi lo malinterpretó y pensó que él estaba llamando solo para saber de su hermano, lo cual lo decepcionó. ¿Acaso él no le importaba?

"No, pero llegó súper cansado. ¿Quieres que te lo pase?"
Preguntó tentativamente. Ambos eran muy distantes, su relación carecía de naturalidad y seguridad. Probablemente no encontrarías una pareja más tensa que la de ellos.

"No, la verdad es que llamé para escuchar tu voz".
Dijo KyuJong apresuradamente para evitar que le entregara el teléfono a su hermano. Se sintió frustrado porque sus conversaciones siempre eran así de rígidas. ¿Por qué las cosas tenían que ser así? ¿No podían simplemente ser espontáneos y amorosos como las otras parejas?

"Ah".
Dijo, mordiéndose los labios ante las tiernas palabras de su esposo. La conversación se había vuelto fastidiosa e incómoda. ¿Sería posible que él aún siguiera afectado con la llamada del mediodía?

"Cariño, ¿sigues enojado conmigo?"
Preguntó KyuJong inquisitivamente, pues no estaba acostumbrado a la frialdad en el tono de HongKi.

"No, eso creo... ¿Por qué lo dices?"
Dijo forzando una sonrisa, que, evidentemente, KyuJong no pudo ver. Aun así, no dejaba de parecer tiesa.

"Estás muy callado, ¿es por lo de esta mañana?"
Le preguntó un tanto preocupado, pues le importaban mucho los sentimientos de su esposo.

"No, no... No es eso. Tan solo estoy algo distraído. Además, soy muy educado como para quedarme enojado por mucho tiempo".
Dijo HongKi, soltando una carcajada. Le mintió, porque realmente sí le había importado lo que pasó en la mañana cuando lo llamó.

Sería muy deshonesto consigo mismo si no admitía que le había molestado; pero, no era por eso que estaba de mal humor, sino por la pelea que había tenido con GeunSuk. No estaba seguro de poder olvidar fácilmente todas las cosas malas que se habían dicho.

"Lo siento si fui demasiado tosco cuando te respondí, también estaba distraído, por el trabajo. Espero que no estés enojado por eso".
Probablemente esa era la primera vez que se sentía preocupado porque HongKi pudiera malinterpretar las cosas, por ello, trató de explicarse lo más clara y sinceramente posible. Quería sentirse a gusto, no incómodo.

"Kyu, ¿en realidad piensas en mí como tu esposo?"
Preguntó, atacando directamente el corazón del asunto.

Sentía como si un glaciar estuviera en medio de ellos dos, impidiéndoles amarse. Percibía esa sensación cada vez que se dirigía él o cuando trataba de abrazarlo, y lo que más deseaba era que ese hielo entre ellos se derritiera, para que así se pudieran amarse plenamente.

Un verdadero amor 6a parte.Where stories live. Discover now