The Longest Promise (Mirror: Zhu Yan)

Capítulo 129. Vol. 2 - Zhu Yan

Sin embargo, Zhu Yan no obedeció su consejo. Al día siguiente, cuando el nuevo Príncipe Heredero visitó el Palacio del Rey Rojo e intervino para recompensar al Rey Vasallo en lugar del Emperador, ella siguió a sus padres.

No esperaba que hiciera un gran alboroto esta vez, ya que tanto el Rey Rojo como su esposa salieron a saludarlo, saludándolo e inclinándose en agradecimiento, mientras ella miraba con asombro a la multitud de personas que rodeaban todo el palacio, y su corazón latía con incomodidad mientras estaba parada allí, aparentemente rígida e inmóvil.

Por un lado, la abuela Sheng tiró de ella ansiosamente y susurró: "Princesa, ¿por qué no te inclinas?"

Se congeló por un momento, de repente se dio cuenta. Ayer se aseguró de que ella no tuviera que salir, solo porque no quería que ella presenciara esta escena... Ahora él era el Príncipe Heredero de Kongsang, el futuro emperador. Había una distinción entre el monarca y sus súbditos, entre los nobles y los humildes. Tan pronto como se conocieron, sus padres tuvieron que postrarse ante él, ¡y ella tuvo que hacer lo mismo!

Ya estaban tan distantes entre sí como las nubes y el barro. Al pensar en esto, su corazón tembló como un trueno y su conciencia se quedó en blanco.

En la multitud de personas postradas, solo quedó de pie la joven Princesa del Clan Rojo. Ella era la única que quedaba de pie en el mar de personas que inclinaban la cabeza hacia el suelo, pero Shi Ying solo la miró sin comprender y no hizo ningún comentario, levantó la mano y ordenó a la familia del Rey Rojo que se pusiera de pie.

El nuevo Príncipe Heredero siguió los rituales y proclamó la bondad del Emperador de Kongsang a favor del Rey Rojo: se abrieron cajas de regalos de felicitación, innumerables tesoros, numerosas recompensas, en una deslumbrante variedad. El ujier seguía anunciando nombres, y los asistentes en el palacio emitían ocasionalmente gritos ahogados de emoción.

Zhu Yan estaba mirando desde un lado, pero sus ojos estaban vacíos. ¿Cuál era el significado de estas cosas para ella? Fue solo una oferta para comprar su libertad de por vida...

Después de que se entregaron los regalos imperiales, Shi Ying se sentó e intercambió algunas bromas con el Rey Rojo y su esposa antes de ir al grano y preguntar: "Me pregunto si la fecha para la boda ha sido fijada? El matrimonio del hijo mayor y la hija mayor de los Clanes Blanco y Rojo es de gran importancia, y cuando llegue el momento, vendré a oficiar en nombre del Emperador".

Zhu Yan se sacudió violentamente, casi dejando caer la taza de té en su mano.

¿Él... él presidirá? ¿Por qué él? ¡¿Cómo podría... consentir tal cosa?! Ella lo miró conmocionada y desconcertada, pero el Príncipe Heredero solo voltio la cabeza para mirar al Rey Rojo y no se distrajo de mirarla.

"¡Estamos agradecidos con Su Majestad el Emperador y Su Alteza Imperial el Príncipe Heredero por su generosa gracia!" El Rey Rojo expresó su gratitud e informó respetuosamente: "Se ha elegido la fecha de la boda, pero aún tenemos que discutirla con el Rey Blanco; una vez que se decida, informaremos al Príncipe Heredero de inmediato".

La expresión de Shi Ying no vaciló, dijo con calma: "Este es un momento extremadamente difícil en el desierto de Yunhuang, así que tengo que hacerlo de prisa, por lo tanto, tendré que compensar la situación con la princesa Zhu Yan".

Cuando dijo esto, finalmente miró a Zhu Yan, pero sus ojos parecían tranquilos y sin vida.

Su corazón saltó y sintió que sus dedos temblaban tanto que apenas podía sostener la taza de té. En el fondo, escuchó a su padre reír y decir: "Todas estas formalidades no son importantes. En la antigüedad solían contraer matrimonio antes de una batalla".