Are You Addicted (Volumen II)

Capitulo 235: Dulzura en el fondo del corazón de alguien

ADVERTENCIA: El capítulo incluye contenido restringido, solo apto para mayores de edad. Evita leerlo si no tienes la edad apropiada.

Gu Hai jaló lujuriosamente de la parte superior del cuerpo del Bai Luoyin y lo atrajo hacia sí, besando salvajemente sus delgados labios. Estos ardientes besos eran como enormes tormentas arrojándose violentamente hacia Bai Luoyin, quien fue incapaz de controlar su propia respiración. Él solo pudo contener el aliento, disfrutando del profundo cariño y amor que provenía de Gu Hai.

Gu Hai no pudo explicar la ardiente sensación en su corazón. En este momento, en esta ocasión, simplemente quería amarlo con fiereza; intensamente tomar posesión de él una y otra vez para hacerle saber que no está solo, que sus mentes y cuerpos finalmente se fundieron en uno solo.

Después de que sus delgados labios se separaron, Bai Luoyin cambió su postura colocándose sobre Gu Hai, lenta y sensualmente le mordisqueó todo el cuerpo. Las manos de Gu Hai siguieron masajeando salvajemente los glúteos de Bai Luoyin; esta era una sensación indescriptiblemente estimulante. Gu Hai incluso quería descender y darles una mordida para ver si sabían tan deliciosos como los había imaginado.

Los labios de Bai Luoyin se engancharon con firmeza en el pezón izquierdo de Gu Hai, retorciendo su lengua de forma erótica mientras seguía jugueteando y asolando intensamente la pequeña protuberancia. Gu Hai comenzó a gemir y a jadear pesadamente. De pronto, sus dos manos que frotaban el trasero de Bai Luoyin, intensificaron sus movimientos, haciendo que este gritara y a continuación le mordiera una zona sensible.

Gu Hai se echó a reír, su mano se acercó a los bóxers de Bai Luoyin y sujetó al pequeño monstruo que había estado acostado por largo tiempo sobe su abdomen. Entonces comenzó a frotarlo apasionadamente, desde la base hasta la punta. Esta acción excitó enormemente a Bai Luoyin, quien como acto reflejo arqueó su cintura para instar a que Gu Hai acelerara sus movimientos. Pero él se negó a satisfacerlo fácilmente, presionó su pulgar en la punta y con crueldad la rascó dos veces. Bai Luoyin de inmediato tensó los músculos de sus piernas, su cara revelaba una expresión de impaciencia.

Gu Hai tomó esta oportunidad para usar sus dedos y esparcir un poco de lubricante en el estrecho pasaje de Bai Luoyin. 

El cuerpo de Bai Luoyin tembló, se giró y asió firmemente la muñeca de Gu Hai, sus ojos mostraban una mirada dominante, “Esta vez déjamelo a mí.”

Gu Hai había esperado que sugiriera esto. Afortunadamente estaba bien preparado. Renunció a un engaño prolongado, sin advertencia, aceleró el ritmo de su mano, con sus movimientos acariciando sensualmente y con vigor el miembro de Bai Luoyin. Él no tenía defensa contra sus supremos movimientos manuales. Después de que Gu Hai exitosamente desvió la atención de Bai Luoyin, lo persuadió maliciosamente y a continuación se lanzó en un intenso ataque, “La próxima, la próxima vez tú lo harás, primero repitamos los buenos viejos tiempos.”