Capítulo 259: Limpiando el crimen del alma

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Estos días, Bai Luoyin había estado descansando cómodamente en la casa de Gu Hai. Repetidamente le pidió regresar a la base militar, pero fue detenido a la fuerza. El razonamiento de Gu Hai era que tenía que ver que la salud de xiaoyinzi hubiese mejorado o si no, no dejaría que Bai Luoyin se fuera. Por supuesto, solo curar a xiaoyinzi no era suficiente. Él también tenía que compensar a xiaoyinzi por los días pasados. 

En el día, Gu Hai se llevaba a Bai Luoyin a trabajar con él. Al medio día, salían a comer juntos. Y en la noche, Bai Luoyin era llevado de vuelta a casa sano y salvo. Gu Hai incluso lo seguía al baño, temeroso de que huyera si era un poco descuidado.

Antes, Gu Hai siempre había estado solo. Todas las empleadas de la compañía se habían acostumbrado a su personalidad natural y sin restricciones. Pero ahora, al verlo trayendo a alguien con él todo los días, entrando y saliendo con él de la compañía con los brazos en los hombros del otro, siendo inseparables las veinticuatro horas del día todos los días, incluso una persona con ojos amplios tendría ligeras sospechas. 

Bai Luoyin tomó ventaja de este periodo de tiempo para revisar el progreso del proyecto de cooperación. Todos los días seguía a Gu Hai al taller y ocasionalmente ofrecía su consejo. Cuando antes discutieron sobre la cooperación, la compañía de Tecnología HaiYin no era el compañero principal de este proyecto. Pero ahora con la maquinación de ambos, esposo y esposo, casi todos los componentes básicos fueron producidos por la compañía de Gu Hai.

Usando las palabras de Gu Hai, el dinero que gano al final será tuyo, así que ¿por qué no mejor mantener las ganancias entre familia? 

Esta tarde, Gu Hai estaba frente a la computadora extremadamente ocupado, Bai Luoyin era como un tío, sentado a un lado, bañándose en los rayos del sol. 

“Presidente Gu, este es el último borrador del proyecto, por favor revíselo.” dijo una empleada.

Gu Hai lo miró, le dio una rápida mirada y enfadado dijo, “Ven aquí y mira esto. Esta parte aún necesitas unos cuantos cambios.”

La empleada de inmediato se inclinó, la mitad de su cuerpo estaba sobre el escritorio con su escote ampliamente expuesto. Con que Gu Hai solo elevara sus ojos, podría ser capaz de ver fácilmente las sensuales curvas y dos grandes bollos blancos.

Bai Luoyin entornó sus ojos al verlo. Entonces los cerró con un una expresión indiferente. 

Pronto, la empleada sonrió, asintió su cabeza de forma comprensiva y se fue contoneando su cintura de forma provocativa.

Tan pronto como la puerta se cerró, Bai Luoyin tosió levemente.

Gu Hai se giró hacia él, “¿Qué pasa?”

Bai Luoyin dobló su dedo índice, “Ven aquí, tengo algo que decirte.”

Gu Hai no pudo sentir el peligro que emitía. Se sentó a su lado y puso su mano en el hombro de Bai Luoyin, dijo casualmente, “¿Qué quieres decirme?”

La mano de Bai Luoyin se deslizó directamente bajo la camisa de Gu Hai, este resistió la tentación. “No juegues aquí. Estamos en la compañía.” Pero en su corazón, no quería sacar la mano de Bai Luoyin.

La mano de Bai Luoyin rápidamente aprisionó el pezón. Frunció sus labios en una sonrisa traviesa mientras usaba sus dos fuertes dedos pare retorcer severamente el pezón, girándolo en dos círculos y medio. Los músculos faciales de Gu Hai se tensaron en un instante.

Are You Addicted (Volumen II)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora