Are You Addicted (Volumen II)

Capitulo 266: Temporal transferencia de contradicciones

Gu Yang regresó al dormitorio de Bai Luoyin, lo encontró recargado en el sofá, con la mitad de su rostro oculto de la luz, su cansada cara se veía un poco misteriosa. Impasible caminó hacia él y se sentó a su lado. Al ver que el piso estaba repleto de cenizas de cigarro, preguntó tranquilo, “¿Has estado fumando aquí desde que me fui?”

Bai Luoyin permaneció en silencio.

Gu Yang inclinó su cara hacia el frente. Bai Luoyin estiró su palma para bloquear los labios de Gu Yang sobre su mejilla.

“Mi cara está muy sudorosa, no ensucies tus labios.”

Los ojos de Gu Yang resplandecieron, “¿No podemos simplemente cambiar la forma en que nos hablamos?”

“Podemos.” respondió Bai Luoyin, girando su mirada hacia él, “Si puedes cortarme una manzana con el grabado de 'El festival Qingming junto al río', te hablaré con un tono amigable.”

Gu Yang tomó una respiración profunda, “Entonces ve y prepárame la cena, ¡tengo hambre!”

Bai Luoyin entró a la cocina. Cuando estaba por lavar los vegetales, una cara maliciosa apareció en la puerta.

“Me gusta la comida con un fuerte sabor.”

Los ojos de Bai Luoyin se movieron hacia él, “¿Sabores pesados? ¿Qué tal si agrego un poco de arsénico?”

“No me importa, ya que la comeremos juntos.”

“No puedo comer contigo.” La declaración de Bai Luoyin era firme, “Mi comandante de división me ordenó que solo coma carne grasa y nada más.”

“¿Zhou Lingyun?” Mientras Gu Yang pronunciaba este nombre, su tono claramente cargaba un ambiente de hostilidad.

Bai Luoyin asintió, “Sí, él quiere hacer crecer mis músculos y durante este periodo de tiempo vigilará estrictamente mi dieta. Si mi estómago muestra algo más que grasa, me castigará.”

“¿Cómo te castigará?” preguntó Gu Yang.

Bai Luoyin sonrió débilmente, “Comer grasa cruda.”

Gu Yang escuchó sus palabras como si fueran una broma. Pero una vez que se dio la vuelta oyó sonidos de estar vomitando a sus espaldas. Gu Yang se dio la vuelta hacia Bai Luoyin y vio que él realmente estaba vomitando. Lo que salió de su boca era una espuma blanca y aceitosa.

“¡Ayúdame a sacar esto de aquí!” bramó Bai Luoyin, señalando un trozo de carne grasa en la tabla de cortar.

Gu Yang levantó el trozo de carne grasa, la miró por unos segundos y la puso frente a Bai Luoyin. Como consecuencia, Bai Luoyin realmente vomitó de nuevo.