Are You Addicted (Volumen II)

Capitulo 262: La pareja regresa a casa de la esposa

Cuando estaban a la mitad de camino a casa. Gu Hai giro su cabeza hacia Bai Luoyin y preguntó, “¿Qué crees que debería comprar para llevarles?”

“¿Qué hay por comprar?” Bai Luoyin respondió casualmente, “No hay escases de nada en casa.”

“No puedo ser desvergonzado como antes y simplemente ir con las manos vacías, ¿cierto? En ese entonces era un estudiante, comer y beber gratis en tu casa estaba bien. Pero ahora soy mucho mayor, es vergonzoso llegar con las manos vacías.”

Bai Luoyin elevó ligeramente sus labios, “Tu desvergüenza hace mucho que ha sido arraigada en el corazón de mi papá.”

“No estoy bromeando contigo.” Gu Hai le instó, “Rápido, piensa en algo. Si no podemos conseguir algo ahora, no habrán centros comerciales más adelante.”

Bai Luoyin frunció sus cejas mientras pernsaba por un momento, pero fue inútil, “No puedo pensar en nada.”

“¿A tu papá no le gusta nada?”

“Sí hay algo que le gusta.” dijo Bai Luoyin.

Gu Hai preguntó, “¿Qué?”

“¡Un gran nieto!”

La expresión de Gu Hai se pausó. De pronto detuvo el coche y lo estacionó al lado de la calle.

“¿Qué tal si ambos damos a luz a uno?” una sonrisa traviesa se formó en la comisura de sus labios.

Bai Luoyin inclinó la cabeza y lo miró, “Tú dalo a luz, ¿hum?”

“Bien, entonces ayúdame a sujetar mi ropa, de inmediato daré a luz a uno.” Gu Hai era muy serio, como si realmente fuese a suceder.

Bai Luoyin lo miró con burla, “¡Pon un huevo para que lo vea primero!”

Gu Hai rápidamente apretó sus dientes, “¿Entonces tú usarás un huevo de Jiang Yuan para incubar?”

“¡Tú...!”

Bai Luoyin de inmediato extendió su puño hacia él y lo golpeó. A continuación los dos lucharon ferozmente y se despedazaron mutuamente dentro del coche. Era tan salvaje la pelea que el automóvil se sacudió violentamente y los transeúntes lanzaron miradas de soslayo hacia su dirección. Gu Hai tomó la muñeca de Bai Luoyin, “Deja de pelear, deja de pelear, vamos a arruinar nuestros peinados si seguimos así.”

“¡Sal del coche!” Bai Luoyin lo empujó hacia afuera.

Gu Hai comenzó a arreglarse el cabello con el espejo retrovisor. Con una actitud preocupada dijo, “¿Salir para qué?”

“¡Sal y compremos algo! ¿No hay un centro comercial por ahí cerca? Vayamos y compremos algo de ropa para mi papá. Creo que él siempre usa la que dejé.”

Gu Hai no pudo evitar burlarse, “¿Tú y tu papá siguen usando la ropa del otro?”

“Nació en una familia pobre de la plebe, él no puede escapar de la mentalidad de carencias. Incluso si tiene dinero, no quiere gastarlo... no puede compararse a tu familia.” Bai Luoyin lo implicó.