Capítulo 50

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—¿Te preguntó algo? —preguntó Olivia una vez que Elliot volvió a su lado.

Él negó con la cabeza sonriendo ante el nerviosismo de su novia.

Había pedido permiso para salir una hora antes de su turno regular, a las siete de la tarde tenían la cita con el doctor para confirmar el embarazo. Olivia había llamado a Teresa para avisarle que iban a demorar un poco, por supuesto la mujer no se quejó ya que por supuesto todo eso era anexo a su sueldo.

—¿Estás bien? —preguntó al ver a Olivia mordiendo la tapa de su lápiz, un gesto claramente ansioso.

—Estoy nerviosa...

—Sólo vamos por la confirmación amor. Ambos sabemos la respuesta —dijo muy seguro—. ¿Estas lista? —ella asintió—. Vamos entonces —le hizo un gesto con la mano para que se pusiera de pie. Ella sacó sus llaves y tomó su chaqueta.

—Está bien —contestó, ir al doctor nunca era el mejor panorama, pero esta vez era algo especial.

Después de cerca de veinte minutos de viaje Elliot detuvo el auto fuera de la consulta médica. Olivia había pedido hora con el ginecólogo que la había estado viendo desde que volvió a Nueva York, claro que ella solo lo había visitado una vez, cuando había ido para las indicaciones de las píldoras anticonceptivas. 

Se quejó del frió llevándose la chaqueta más cerca de su cuerpo, una vez ya fuera del auto. Elliot sonrió y se acercó a ella, pasando una mano por su hombro, sabía que era mucho más que frío, ella estaba nerviosa. Elliot sabía que odiaba ir al médico y últimamente había tenido que ir un par de veces.

Le informó a Elliot que iba a registrarse una vez que estaban dentro de la consulta. Pudo ver a las mujeres en distintas etapas del embarazo, dos de ellas estaban con sus respectivos novios, parejas o maridos, ella obviamente no hizo conjeturas respecto de los estados civiles de cada una de ellas. Observó a Elliot que había tomado asiento, estaba agradecida de que él la acompañara, era una cosa de dos, ella lo sabía, solo que antes, durante el embarazo de Emily ella había estado prácticamente sola pero ahora todo era tan diferente.

—El doctor la llamara en cualquier minuto —indicó la recepcionista. Ella se había quedado mirando fijamente a Elliot y la mujer la saco de sus pensamientos.

—Oh...gracias.

Olivia se sentó junto a Elliot y él tomó su mano para ponerla entre las suyas, dejándola sobre su rodilla para darle suaves caricias, las que ella aceptó agradecida, no había nadie que los conociera en esa sala de espera.

—Olivia Benson —escucharon la voz de alguien que desconocían. Olivia miró hacia donde venía la llamada, era la recepcionista—. El doctor está esperando por ustedes —agregó sonriendo.

—Gracias —miró a Elliot, ambos se pusieron de pie. Era extraño para un hombre ir a un ginecólogo, por supuesto que lo era, pero él quería ser participé desde el primer minuto.

Ella buscó la mano de Elliot para entrelazar sus dedos y él apretó suavemente su mano.

—Vamos —dijo Liv tomando la iniciativa para ir a la oficina del doctor.

Una vez que el doctor vio entrar a Olivia y Elliot hizo un gesto a las sillas frente a su escritorio.

 —Por favor tomé asiento —ambos siguieron las indicaciones, por supuesto que fueran acompañadas por un hombre siempre era un indicativo de que tipo de consulta iba a ser, tomaron asiento casi coordinados—. Bien —continuó, observando la ficha en su escritorio—, ¿qué puedo hacer por ti, Olivia?

—Yo eh... —titubeo al principio—, uh... creo que estoy embarazada —dijo por fin, Elliot tenía su mano apoyada en la espalda de ella.

—Bien... voy a realizar algunas preguntas de rutina para luego examinarte —indicó el hombre adhiriendo una hoja al archivo de Olivia—. ¿Estas tomando algún método anticonceptivo?

Renacer - BenslerWhere stories live. Discover now