Capítulo 120

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—Papá me dijo que se había sometido al examen, que al ser del mismo tipo de sangre... había una posibilidad.

—Es una pequeña posibilidad, pero sí, esta presente.

—Quiero hacerme el examen.

—Cariño... —un nudo en la garganta le impedía hablar, se había quedado sin palabras.

—Liv... siempre has estado ahí para todos nosotros, para mí y mis hermanos —dijo Maureen tratando de convencerla, quien movía la cabeza de un lado a otro.

—No puedo aceptar que hagas algo así.

—Soy mayor de edad Liv, puedo tomar mis propias decisiones.

—Yo sé...

—Esto es lo que hacen en las familias Liv... se ayudan. No puedo ver a mi hermanita pequeña enferma y quedarme de brazos cruzados. Tengo que hacer aunque sea el intento.

Los ojos de Liv se ampliaron ante la mención que había hecho Maureen de Emily, ella se había dado cuenta de la reacción.

—Ella es mi hermanita Liv... —sonrió ante la ligera mirada de pánico que tenía Olivia en su rostro, si Kathy escuchaba eso de seguro le iba a molestar—. Nosotros la amamos...

Olivia asintió sin palabras, ambas habían sido acogidas dentro de una familia llena de amor, compasión y solidaridad.

—Gracias cariño... eso significa mucho para mí —se acercó y la abrazó. Muchas veces estuvo a punto de decirle a Emily "ve donde tus hermanos" y había alcanzado a reaccionar antes, pero ahora eso que nacía de ella de forma espontánea no iba a tener que evitarlo.

—Ahora voy a dentro a ver como lo esta haciendo mi hermanita... —sonrió nuevamente—, y voy a hablar después contigo y mi papá —agregó ella no iba a ceder y aceptar un no por respuesta.

El momento había pasado un peaje en Olivia. Sus manos estaban ligeramente temblorosas, momentos como estos eran sin duda apreciados, atesorados por ella en su corazón, sin duda los hijos de Elliot habían heredado su hermoso corazón.

—Esa fue tu hermana cariño... —dijo poniendo una mano en su vientre, rogando que Matías también tuviera esos hermosos sentimientos.

***

—¿Estas bien? —preguntó Elliot una vez que Liv ingresó a la habitación, se había demorado más tiempo del que había pensado, parte por la conversación con Maureen y porque se había tomado algo de tiempo adicional para recomponerse, estaba segura que iba a llorar en cualquier minuto.

—Sí... —dijo casi en un susurro, Emily se había cansado y estaba recostada en la cama.

—Kathy viene en unos minutos por los chicos —comunicó, por suerte ella se había ofrecido en pasar a buscarlos para que Elliot no dejara a Olivia sola nuevamente.

—Eso es muy amable de su parte —suspiró, en su interior un sin fin de emociones.

—¿Hablaste con el doctor? —preguntó en voz baja y ella asintió.

—Mañana tiene una hora libre, me va a ver de forma excepcional —contestó en voz baja para no alarmar a los niños que estaban viendo televisión.

—Papá, ¿podemos hablar? —dijo Maureen, ella sabía que en cualquier minuto su madre iba a pasar por ellos.

—Claro, ¿esta todo bien? —preguntó Elliot, su hija asintió.

—Sí, solo quiero hablar de algo realmente importante —respondió no había necesitado mucho tiempo para tomar la decisión—. ¿Puede venir Liv contigo?

Renacer - BenslerWhere stories live. Discover now