Capítulo 101

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—Vamos a casa... —apoyó Fin a su compañero.

—Esta bien por mi... —dijo Liv.

Todos se pusieron de pie. Liv estaba poniendo llave a su escritorio cuando sintió la puerta de la oficina de Cragen.

—No pueden irse... tenemos una nueva victima.

—¿Otra víctima? —preguntó Fin.

—Tenemos otra víctima pero con las mismas características de las otras dos —dijo Cragen para que quedara claro que tenía relación con el caso que tenían actualmente entre sus manos.

—Eso sería, ¿qué?... ¿su tercera victima en menos de tres días? —dijo Liv denotando cierta angustia en su voz, por lo general las víctimas de violadores en series eran en semanas, o meses, nunca con tan poca diferencia, sólo de horas. Aunque era extraño, no era imposible, considerando que nada tiene que ver con el deseo sexual del violador, sino con la necesidad de poder que satisface al atacar a sus víctimas.

—Acaba de llegar una victima hace veinte minutos atrás al Mercy —informó Cragen—. Una mujer llamada Melisa se contacto con nosotros. Preguntó por alguno de ustedes dos —agregó, quien tenía directo vínculo con la central de la policía, lugar donde había sido recepcionada la llamada.

—Es enfermera del hospital —comentó Elliot.

—¿La conocen?

—La conocimos hoy. Fue quien atendió a Annette, nuestra victima —respondió, de alguna manera tenían suerte de que la enfermera estuviera involucrada de cierto modo y afortunadamente la mujer unió los puntos de inmediato y tuvo la sensatez de ponerse en contacto con ellos.

Cragen miró a sus detectives, tenía 4 opciones frente a él. Miró a Olivia, él no se iba con rodeos.

—¿Puedes seguir hoy? —preguntó directamente a Olivia.

Ella asintió, estaba agotada, pero ella nunca dejaba un caso mientras estuviera abierto y embarazada o no esta no iba a ser la excepción.

—Estoy adentro —respondió mirando a Elliot de reojo, quien claramente no estaba de acuerdo con su decisión y claro estaba ella había admitido que estaba cansada hace un par de horas atrás.

—Entonces tu y Stabler vayan a hablar con la victima —ordenó Cragen mirando la disconformidad de Elliot, la cual era visible para todos en la sala.

Elliot no dijo ni una palabra y esperó a llegar al auto para hacerlo.

—Deberías haber tomado la opción de ir a casa Olivia —dijo luchando contra la dureza de sus palabras.

—Yo sé —contestó sin voltear la mirada.

—Tienes mas de seis meses y medio de embarazo, Liv, deberías estar ya en un escritorio —tomó un respiro profundo—, pero ¡Dios! Eres tan obstinada —estaba seguro que mientras más él insistía ella más cerrada se iba a volver.

—Conozco los límites de mi cuerpo Elliot, puedo seguir en el caso —su voz no dejaba opciones para más discusión.

Elliot guardó silencio, después de todo él se había prometido no presionarla, darle su espacio y confiar en que en algún momento ella se iba a dar cuenta de que debía estar detrás de un escritorio el resto de semanas que le quedaba antes de tomar el descanso maternal.

Olivia sabía que probablemente al día siguiente con suerte iba a poder estar de pie pero el aquí y ahora la mantenían en el caso, sin mencionar que era consciente que eran sus últimos casos en varios meses. Había llamado a Cinthia, niñera de Emily, para que se quedara más tarde. La mujer no tuvo objeciones ya que la niña prácticamente no daba problemas.

Renacer - BenslerWhere stories live. Discover now