Capítulo 181: Estado diferente

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Klein no se apresuró a derribar el muro de espiritualidad cuando regresó a su habitación. En su lugar, sacó con pericia una vela infundida con sándalo y la colocó en medio de su escritorio.

Luego siguió los pasos del ritual, encendiendo la vela con su espiritualidad y esparciendo esencias, extractos y polvo de hierbas que simbolizan la buena suerte y el misterio. Vio que la llama alternaba entre ser apagada y brillante mientras aspiraba la fragancia de la paz y la armonía.

Klein retrocedió dos pasos y miró la vela sobre la mesa. Luego gritó en el lenguaje de los gigantes: "¡Yo!".

Después de una pausa, cambió a Hermes, "Invoco en mi nombre:

"El Loco que no pertenece a esta era, el gobernante misterioso sobre la niebla gris; el Rey de Amarillo y Negro que maneja la buena suerte."

En ese momento, la llama parpadeante se fusionó con el aroma armonioso para formar un vórtice ilusorio, un vórtice que absorbió maniáticamente la espiritualidad.

Después de que Klein terminó de recitar los encantamientos, el vórtice se estabilizó y se convirtió en un círculo de niebla blanca grisácea del tamaño de la palma de la mano.

Después de observar la niebla, Klein dio cuatro pasos en sentido antihorario sin dudarlo. Regresó al mundo por encima de la niebla y, como esperaba, vio ondas de luz que se extendían desde su silla de respaldo alto, acentuando el aura misteriosa del extraño símbolo, el ojo sin pupila y las líneas parcialmente contorsionadas, en su silla.

Respiró hondo y calmó su alma usando Cogitation antes de extender su mano hacia el objetivo.

En ese momento, escuchó los encantamientos que acababa de recitar. Vio la espiritualidad creciente y la luz ondulante fusionarse para formar una puerta ilusoria.

En comparación con la vez anterior, ¡la puerta ahora estaba completamente formada y estaba grabada con patrones misteriosos!

.

¡Los patrones eran los mismos que el símbolo en el respaldo de la silla del Loco, un símbolo formado por el Ojo sin Pupila y las líneas parcialmente retorcidas!

Mientras miraba la puerta, Klein enfocó su mente y deseó que la puerta se abriera.

Sin previo aviso, se formaron ondas en la eternamente inmutable niebla de color blanco grisáceo y el majestuoso palacio, como una piedra arrojada en un estanque pacífico. La onda se extendió en dirección a la Puerta de la Invocación.

De repente se pudo escuchar el sonido de un fuerte raspado causado por la fricción. Apareció una rendija en la pesada y misteriosa puerta. Más allá, uno podía ver débilmente un mundo inmensamente oscuro, lleno de innumerables figuras transparentes e indescriptibles. También había rayas de diferentes colores, un esplendor lustroso que albergaba un conocimiento infinito.

En ese momento, Klein sintió una fuerza de atracción irresistible e inimaginable que venía del otro lado de la puerta. No pudo evitar sentirse atraído hacia él.

¡Maldita sea! ¿No me estás dando a elegir? Justo cuando tuvo ese pensamiento alarmante, su cuerpo atravesó la rendija y desapareció en la oscuridad detrás de la puerta.

Los rugidos vertiginosos y maníacos se calmaron gradualmente. Klein finalmente recobró el sentido.

Vio a un joven frente a él. El hombre vestía una camisa vieja, tenía cabello negro, ojos marrones y rasgos faciales de apariencia normal. El hombre tenía una constitución promedio, era un poco delgado, pero su cuerpo parecía ocultar un poder considerable. También tenía el comportamiento obvio de un erudito.

LORD OF THE MYSTERIESWhere stories live. Discover now