Capítulo 63

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La verdad

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Shen Meidong dijo algo que hizo estremecer a todos los presentes, ¿hay algo más que no saben?, ¡quién hubiera pensado que el caso de hoy pudiera involucrar un caso de hace meses!

Shen Ziying se congeló al instante, su rostro cambió drásticamente, gritando:

— ¡No digas mentiras, las autoridades son muy listas, no van a creer inventos!

El magistrado del condado pensó, Shen Meidong ya ha hablado, y la actitud de Shen Ziying ha cambiado, esto quiere decir que hay algo más, el magistrado no está feliz, y necesitaba seguir escuchando para tomar una decisión.

Él dijo:

— Shen Meidong, sigue hablando.

Shen Ziying ahora estaba nerviosa, pero era demasiado obvia, y rápidamente controló sus emociones.

Shen Meidong no sentía más que odio e ira juntos, carcomiendo su cabeza, ya no puede preocuparse por nada, y debe decir todo lo que sabe, incluso si sus propias acciones son iguales de viciosas, ¡ya no le importa nada!

Shen Meidong se apresuró a decir:

— Un día, hace once meses, pasé por la casa de Shen Dashan, ¡y vi a Shen Ziying lanzando hierbas encendidas a la habitación de Shen Ruo! Ahora puedo reconocer esa hierba, las hojas y tallos son iguales, ¡era la hierba ZhaoYan! En ese momento, no sabía para qué servía la hierba, ¡sólo pensé que ella quería incendiar la habitación de Shen Ruo y quemarlo hasta la muerte! No quise involucrarme porque no tengo una buena relación con su familia, así que me fui. Pero después de mucho tiempo, me sentí inquieta, porque temía que alguien me hubiera visto. ¿Y si Shen Ruo hubiera muerto quemado y los demás pensaban que había sido yo? Volví para ver si estaba ardiendo, y si lo estaba, llame a alguien para que apagara el fuego, al menos así pensarían que no fue mi culpa. Y si alguien me hubiera preguntado, ¡naturalmente entregaría a Shen Ziying!

Las cejas del magistrado del condado se funcieron mientras escuchaba, debido a que Shen Meidong dijo esto, la hierba que Shen Ziying arrojó debía ser la hierba ZhaoYan. Observó cuidadosamente el comportamiento de Shen Ziying después de escuchar lo que Shen Meidong dijo.

En ese momento, la expresión de Shen Ziying estaba un poco nerviosa.

Pero, por obvias razones, ella replicó inmediatamente:.

— ¡Yo no lo hice!, no he hecho nada, no lo admito, ¡no sigas inventando cosas!

Como resultado, fue golpeada por los oficiales de Yamen con un palo, y no se atrevió a seguir vociferando en el tribunal público, por lo que sólo pudo dejar que Shen Meidong continuara.

Shen Meidong sólo quería delatar a Shen Ziying, y continuó:

— En aquel momento, cuando regresé, me di cuenta de que la casa de barro no se había quemado en absoluto. Así que miré más de cerca y descubrí que Shen Ruo estaba con un hombre, ¡haciendo ese tipo de cosas! Me quedé muy sorprendida, no parecía normal, inmediatamente pensé que Shen Ziying tiró la hierba ZhaoYan, de lo contrario, ¿por qué Shen Ruo sería capaz de hacer tal cosa?, ¡y a plena luz del día sin cerrar la puerta!, me hubiera gustado correr la voz, era la primera vez que ocurría algo así en el pueblo, además de que la madre de Shen Ruo y yo tenemos un rencor entre nosotras, obviamente quisiera que su pequeño ge'er no fuera bueno, ¡si se lo dijera a todo el pueblo, Shen Ruo estaría acabado! Incluso pensé que Shen Ziying hizo un buen trabajo.

CDGDZQYZZ [1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora