S T R A Y : 𝒌𝒊𝒏𝒈𝒔

.•°•.|CXVII. Encuentro inevitable|.•°•.

Ellos estaban tomando el camino más corto, ya que entre ellos se encontraba la muchacha que los hechiceros estaban buscando, por lo que no tuvieron mucho problema con encontrar la biblioteca.

Hyujin estaba familiarizado con lugares así, puesto que siempre encontraba a sus hermanas con un libro cerca. Eran, en ese aspecto, tan diferentes a él. En ese momento se preguntó si estarían bien, o si Jeongin al cuidarlas también estaba bien. Le preocupaba cada persona del equipo. Lo ponía ansioso. Entre tantos pensamientos miró a su lado, encontrando el rostro de Seungmin, quien lo había estado mirando en silencio. Tal vez lo había estado mirando de soslayo, puesto que estaban en medio de una caminata, con Chaeryeong y Woojin detrás de ellos.

- ¿Estás bien? - le interrogó en voz baja. No debían atraer a ningún monstruo al lugar por nada del mundo.

Hyunjin asintió.

- Estoy bien. Sólo estoy preocupado por los demás. Mis hermanas no tienen poderes, así que . . .

- Jeongin es el escudo del equipo, ¿recuerdas? Si está en problemas, Chan lo ayudará. Tienen una conexión, algo extraña, pero real. - intentó animar el menor, sin saber que Hyunjin no era el único que se había mantenido atento a sus palabras.

Chae notó al instante la mueca de Woojin, y tras unos segundos, tocó su hombro para llamar su atención. El mayor le miró curioso.

- ¿Se encuentra mejor de su brazo? El día que me salvó resultó herido por una de esas flechas.

- Oh, eso. No te preocupes. No fue nada grave. Tan sólo mira a Jeongin, está de maravilla, y yo estoy mejor. - respondió rápidamente, sin darse cuenta que Chae sólo había querido iniciar una conversación para distraerlo de la charla que estaba teniendo la pareja frente a ellos. - Gracias por preguntar. Nadie, a excepción de ti, lo ha hecho.

- Oh . . .

- Está bien. - indicó él al ver su expresión apenada. - Ellos tanto como yo están concentrados en cosas mucho más importantes. No tengo problema.

A Chaeryeong le tomó unos segundos decidir si debía o no decirle lo que tenía en mente, pero al final supo que era necesario.

- Por favor . . . no se menosprecie, rey Kim. Usted es importante también. Debe aprender a no subestimar su valor como ser humano.

Woojin se la quedó viendo fijamente, repasando sus palabras una y otra vez en su cabeza, sin saber cómo responder. ¿Realmente no se valoraba?

De repente, y en medio de sus pensamientos, todo el equipo escuchó una voz a sus espaldas. Inmediatamente voltearon, y el rey Kim por inercia tomó el brazo de Chae y la atrajo hacia él, para después ubicarla detrás, donde estaban Seungmin y Hyunjin, quienes se quedaron congelados de la impresión por la persona que les dedicaba una mirada sombría. Seung notó el radical cambio de la mirada de quien alguna vez fue su amigo.

- Jungkook . . .

- Rey Seungminnie. - saludó el mayor con una sonrisa ciertamente escalofriante. - Realmente esperaba éste momento más que ningún otro. Nuestro encuentro inevitable.

Rápidamente, en cuanto todos notaron la mirada de Yugyeom y Hoseok en Chaeryeong, Seungmin y Hyunjin salieron al frente, y Woojin se quedó cerca a ella, tras la protección de la pareja recién reconciliada.

Lo único que había alrededor de todos eran estantes llenos de libros, que ninguna persona en el mundo podría terminar de leer en toda su vida. Ni siquiera un hechicero.

- Esto es lo que querías, ¿no es así? - manifestó Seungmin con un tono de voz más grave y firme que el que comúnmente empleaba. - Reunirnos y hacer que hagamos el trabajo por ti, porque no eres capaz de hacerlo tú mismo.