Poisoning the World 2: Envenenando al mundo 2

CAPITULO 320: Destructor del cielo una estrella calamitosa (2)

"¡Qué audaz! ¡Te atreves a hacer daño a nuestro joven maestro!"

"¡Debes estar cansado de vivir! Nuestro joven señor es el único hijo amado del duque."

"¡Mata al gato!"

Todos los sirvientes rodearon agresivamente a Ning Xuemo y querían agarrar a Little Apple en su brazo.

Ning Xuemo frunció el ceño. Cogió a Little Apple por la nuca y preguntó "Little Apple, ¿quién te permitió rascar a la gente? Mira esto, ¿no están tus garras todo sucias ahora?"

Después de eso, sacó un delgado pañuelo de seda y lo usó para limpiar las garras de Little Apple antes de tirarlo.

Todos los criados estaban sin palabras, "......."

¡Incluso el rostro del joven maestro se volvió verde!

"Bastarda! Te atreves a dejar que ese gato lesione a la gente. ¡alguién!" El joven maestro estaba completamente desconcertado mientras daba su orden.

Todos los siervos respondieron en unión, "¡Sí Maestro Joven!" Estiraron sus manos para agarrar a Ning Xuemo.

El intento de matar cruzó los ojos de Ning Xuemo. Estaba a punto de moverse, pero algo salió disparado de las sombras cerca de ellos. La figura de una persona se deformó y se desplazó a través de todos los sirvientes. Cada vez que la figura pasaba ante un sirviente, sólo veían las estrellas que brillaban frente a sus ojos antes de caer al suelo, inconscientes. Sus gemidos se quedaron atascado en su garganta sin posibilidad de ser escuchados.

Después de que el polvo se asentó, los sirvientes que la rodeaban estaban tirados en el suelo. Las únicas 4 personas que quedaron en pie estaban vestidas con uniformes de guardia del palacio. Se inclinaron ante Ning Xuemo.

Ning Xuemo los clasificó. "¿Quién eres tú?"

"Informando a la señorita, somos los subordinados de su alteza del príncipe heredero. Nos ordenaron proteger a la señorita Ning". Otro guardia respondió.

Entonces, Ji Yunhuang no la había echado a un lado como había pensado. Él había enviado un grupo de 4 guardias para protegerla.

Reconoció a la guardia imperial que acaba de hablar con ella. De hecho, él era la guardia del Príncipe Heredero cuando recordó haberlo visto en la residencia del Príncipe Heredero durante su corta estadía allí...

Ella asintió con la cabeza y luego dirigió una débil mirada hacia el tembloroso hermano que sostenía el ventilador, que todavía estaba allí parado. "Joven Maestro, ¿todavía quieres capturarme?"

¡El Hermano que sostenía el ventilador estaba casi asustado hasta el punto de orinarse en los pantalones, a pesar del hecho de que estaba ileso!

No creía que la joven sin siquiera una criada que la acompañara sería alguien que su Alteza el Príncipe Heredero quería proteger. Si lo hubiera sabido, no se habría atrevido a desafiar al Príncipe Heredero, aunque tuviera 8 veces las tripas.

Al ver a los 4 guardias personales del Príncipe Heredero, estaba tan asustado que no se atrevió a dejar ni siquiera medio pedo.

Apresuradamente le pegó una sonrisa de disculpa en la cara. "Es sólo un malentendido, simplemente un malentendido. Los sirvientes no estaban pensativos y asustaron a la señorita. Espero que me dejes redimir este error..."

"Entonces, ¿no quieres matar a mi gato?" Ning Xuemo frunció el ceño.

"¡Por supuesto que no! Tu gato es muy listo. Jejeje Es muy inteligente, un gato muy bueno..." Mientras el joven abanico sonreía y se disculpaba, hizo una señal a todos los sirvientes que se estaban arrastrando. Todo el grupo huyó arrastrándose.

"¿La señorita regresará a la residencia o va al médico para ser examinada?" preguntó el jefe de los 4 guardias.

"Regresemos a la mansión." Ning Xuemo agitó con entusiasmo su mano. La pequeña herida en su hombro podría ser manejada fácilmente. Echó un vistazo al 2do piso. A través del gran agujero en la pared, todavía no podía ver mucho como la luz era demasiado tenue. Parecía que esa persona ya se había ido.

'Olvídalo'. Ella estaba en malos términos con el hombre y actualmente, su fuerza no estaba a la par con él.

Sostuvo a Little Apple en forma de gato y se dio la vuelta para irse.

Tenía que admitir que lo más raro era la familiaridad del olor del aquel hombre. Parecía oler como un viejo amigo.

Sin embargo, no pudo recordar quién era...

Además, seguía sintiendo que se había olvidado de algo importante, pero no pudo determinar con exactitud qué era lo que se estaba perdiendo.

....................................

En el 2do piso.

Los 2 pequeños ayudantes temblaban en un rincón mientras el Gran Maestro Han Shanyue permanecía inexpresivo frente a la mesa.