Poisoning the World 2: Envenenando al mundo 2

CAPITULO 350: Los asuntos de amor del portador de la desgracia (2)

Sin embargo, aún había momentos en los que Ning Xuemo se topó con algunos de los supuestos encuentros de amor. Por ejemplo, en ese momento, ella estaba en una joyería y estaba eligiendo un brazalete. Ella había elegido una de color verde oscuro y estaba a punto de sacar su dinero cuando alguien extendió una mano, seguida por una distinguida voz "Comerciante, toma estos billetes de banco. Pagaré por esta señorita ".

Ning Xuemo giró la cabeza y vio una figura bastante robusta. Era un joven bien vestido fingiendo estar confiado y relajado mientras se abanicaba. Él tenía una sonrisa en su rostro mientras la miraba.

Ning Xuemo inclinó la cabeza. "¿Por qué quieres pagarme?"

"Un jade tan fino merece tal belleza. Esta pulsera es más que adecuada para una señorita noble". El joven miró la elegante y etérea cara de Ning Xuemo y quedó deslumbrado por ella. Una vez más, miró a su inocente y puro semblante y de repente sintió como si un gato hubiera arañado su corazón.

No pudo evitar querer tantearla. En una mano sostenía el brazalete, mientras tomaba la mano de Ning Xuemo con la otra mano. "Ven aquí, ven aquí. Permíteme ponértelo".

Su mano de lobo aún no había agarrado su suave mano cuando su cuerpo fue volteado al revés. Sin esperar que gritara por sorpresa, primero lo mandó salir volando de la tienda. *¡Bam!* ¡Se cayó de suelo!

Intentó arrastrarse a pesar de que el mareo le golpeaba el cerebro. Una huella estaba claramente delineada en su abdomen. Un adolescente guapo, vestido de negro, estaba fríamente sobre él. El adolescente habló "¡Ella no es alguien a quien personas como tú puedan provocar! ¡Sé discreto y piérdete!"

El joven y fuerte maestro se retiró abatido bajo la mirada animada de la multitud.

Otros hombres que querían establecer una conversación con Ning Xuemo también se retiraron con miedo, y desanimado, sin atreverse a intentar de nuevo.

Ning Xuemo salió y recorrió con la mirada de la multitud de gente que se había retirado muy lejos. Ella sacudió la cabeza ligeramente. Ella habló en tono medio de broma "Xijue, te llevaste todas mis flores de durazno. Sabes, no es fácil para un portador de la desgracia encontrar flores de durazno como ese".

(T: Flores de durazno: Chico/a hermoso)

Xijue se quedó sin expresión mientras él simplemente contestaba "No te combinan".

Ning Xuemo suspiró, "Eres tan feroz. Me temo que no podré casarme en el futuro".

Simplemente había hablado sin pensar mucho, pero cuando dio 2 pasos, Xijue todavía no la había seguido. Ella giró la cabeza en curiosidad. Vio que todavía estaba parado en el mismo lugar, mirándola con una leve sonrisa.

"¿Qué pasa?"

"Es poco probable que te cases". La voz de Xijue era ligeramente impertinente cuando agregó "Si es así, me casaré contigo".

Ning Xuemo tropezó, luego comenzó a reír a carcajadas. "Ese sentimiento es bueno. Más tarde, si no puedo casarme, me casaré contigo".

Ella le contestó en broma sin pensar y luego se volvió para seguir paseando.

Xijue permaneció allí mirándola durante un largo rato con una luz compleja en su mirada.

Aunque él había soltado esas palabras por capricho, dio lugar a una extraña sensación en su corazón después de que las palabras salieron de sus labios.

Para cuando recuperó su espíritu, Ning Xuemo ya había caminado muy lejos. Estaba a punto de comenzar a alcanzarla cuando, de repente, sintió algo. Volvió la cabeza y miró el pabellón al costado de la calle.

Dentro del pabellón se encontraba un hombre joven con el pelo negro y fino, del color de la tinta, que llevaba un amplio vestido con mangas grandes. En el vestido azul cielo, había una pintura de tinta de montañas y ríos. Cuando soplaba el viento, las nubes y la niebla en el paisaje parecían cobrar vida y moverse...

'Que extraño.' La otra parte claramente no llevaba ninguna máscara, pero Xijue no pudo ver con precisión las características faciales de la persona. Simplemente tuvo la impresión de que el hombre era extremadamente guapo. Todo su ser parecía estar envuelto en nubes y niebla, como una persona sobre el mundo mundano.

Frente al hombre, había un tablero Go con piezas esparcidas por todas partes como si solo estuviera jugando un juego.

Pero... no se podía ver a ningún oponente frente a él. Era como si estuviera jugando contra sí mismo.

El hombre simplemente dirigió una mirada de a Xijue, pero Xijue de repente tembló y comenzó a temblar de frialdad.

¡La mirada de este hombre era muy fría! ¡Incluso la frialdad de la nieve eterna no se podía comparar! Xijue casi fue congelado en el acto desde una sola mirada.