Capítulo 38

5.7K 599 223
                                    

Capítulo 38

“Vecinos insoportables”

Le di los cuatros dólares que le faltaban a Archie para que se largue después de comerse una comida que había dejado encima de la mesa. Ya la noche se asomó, eran las ocho y treinta y nueve. Azael se había ido en el coche después de dejarme en mi casa y no se llevó a Archie porque seguía dormido.

El compañero más chistoso e infantil que tenemos sonrió como si no hubiese hecho nada, metiéndose en el taxi. Me quedé con una cara seria, pero por dentro quería estallar en carcajadas. Verdaderamente que la vida de Archie parecía un meme. Vi el auto irse con él y justo cuando entré al departamento para luego cerrar la puerta alguien detuvo aquel acto dándole un pequeño empujón.

—Hola —escuché y mis ojos cayeron en una chica de pelo castaño oscuro y suelto. A su lado había tres chicas más que se me quedaban mirando con una sonrisa pícara y a la misma vez vergonzosa.

—¿Podemos pasar? —preguntó otra de las chicas; una pelinegra con falda extremadamente corta y pelo cortado hasta encima de sus hombros. Su tono de piel era oscuro y sus ojos por igual.

—Como vecinos que somos, claro —corroboró una rubia de piel albina y ojos verdes brillantes. Sus mejillas se sonrosaron cuando me habló y mi única reacción fue elevar una ceja y dejar la otra abajo. El tono que voz en el que dijo eso no me pareció de vecinos.

—Pero si quieres otra cosa, pues… —la primera que decidió hablarme y me detuvo al cerrar la puerta posteriormente al saludo posó en mí una mirada coqueta de la misma forma que jugueteó con un piercing en su lengua.

—Vamos a presentarnos primero, ¿no? —se acercó la que no había hablado ni conversado nada. Su nariz estaba repleta de pequeños piercing al igual que en su oreja. La sonrisa que tenía en la cara dejaba claro que quería otra cosa, no por amabilidad, ya había pasado situaciones como estas —Soy Carol.

—Yo soy Alaia —me sonrió otra chica con picardía tras decir su nombre.

—Ivelka.

—Yeni, ¿y tú, guapo? —se mordió los labios.

Mi asombro y confusión lo dejaba muy claro y ni siquiera sin disimularlo para ellas. No sabía por qué razón no se dieron cuenta de la incomodidad que empecé a sentir por su interrogatorio tan arduo. Los gestos, las maneras de hablar y de verme por parte de ellas no era algo que me agradara, al menos no ahora que me encentraba con pareja. Si me lo hubiesen dicho antes quizá y no me sintiese como ahora.

—Mi nombre es Deniel —principié mi presentación cortés para no parecer pesado dando mi nombre.

Sonrieron más y sus lluvias de preguntas volvieron a caerme como si se trataran de investigadores del FBI:

—¿Cuál es tu apellido? —si no me equivocó la primera que preguntó fue la tal Yeni.

—¿Me das tu número de teléfono? —dijo otra.

—¿Trabajas o estudias?

—¿Tienes novia?

—¿Hijos?

—¿Algún hermano?

—¿Vas a vivir solo o acompañado?

—¿Eres gay y los dos chicos que estaban contigo tienen un romance?

—¿Haces tríos gais?

—Yo te vuelvo hetero cuando quieras, eh. Un gay es gay porque una mujer nunca se le ha movido bien.

Cada una de sus indagaciones me hicieron sentir el triple de incómodo que antes. Logré escucharlas todas, sin que se me olvide alguna, pero si fuese otra persona no dudaría que les hubiese pedido a las chicas que se la repitan, pues hablaban juntas como un gallinero.

El Stripper +18 (COMPLETA) PARTE 1 y 2Where stories live. Discover now