[[Amor en el Palacio]]

CAPITULO 67 "FAVORECIDO"

A principios de julio, el cielo estaba especialmente azul y claro. El sol abrasador de la tarde hace que la majestuosa Ciudad Imperial parezca aún más dorada. Una bandada de palomas volaba sobre el alero de la librería, proyectando una pequeña sombra gris y oscura.

A esta hora del día, Ke Wei Qing normalmente estaría secando sus libros antiguos en el espacio abierto, pero hoy está sosteniendo un volumen amarillento bajo el alero de la veranda, leyéndolo cuidadosamente.

La herida de su dedo se ha curado porque ha encontrado una buena manera de usar el dedal que utilizan los bordadores y luego hacer el trabajo de encuadernación sin volver a romperse las yemas de los dedos.

Por supuesto, los dedales en forma de aro se agrandaron con un cincel antes de colocarlos. Una vez que sus dedos dejaron de doler, pudo trabajar más rápido, y sólo entonces fue capaz de robar algo de tiempo para leer el libro que tenía entre las manos.

Ke Wei Qing había leído la historia del Gran Yan desde que era un niño, y todo ello escrito por el Historiador Imperial. Sin embargo, este volumen fue escrito por un funcionario de la dinastía anterior y fue firmado por "Wuqiu"(1). Es más un ensayo que un libro de historia, con un lenguaje sencillo y no oficial que permite "ver por uno mismo" la batalla de ingenio entre los funcionarios de la corte.

También es un relato detallado de la respuesta a las catástrofes naturales, así como de las propias opiniones sobre la idoneidad de las acciones del emperador, lo cual es raro en un libro de historia que siempre ha sido "sin prejuicios" y muy audaz.

Este libro fue encontrado por Ke Wei Qing en una pila de libros viejos que estaban a punto de ser desechados, y después de echarle un vistazo superficial, lo encontró tan valioso que no pudo dejarlo de lado.

Este "Wuqiu" no sólo tiene una mente fina y una visión única, sino que también es cínico con el mal, y es un funcionario bueno y recto. Si todavía estuviera en la corte, habría sido un brazo fuerte del Emperador y no habría permitido que el Partido Zhao dominara la corte.

Ke Wei Qing piensa que no puede ser tan elocuente e ingenioso como Wuqiu, y cuando se trata de tácticas políticas, cree que el entrenamiento militar es más adecuado para él.

Es difícil llevar a los soldados a la batalla, pero es mucho más cómodo estar con soldados que tienen el valor de su corazón que estar en la corte donde hay tanto engaño.

Ke Wei Qing no pudo evitar pensar en Zhang Huzi y Liu Fuqiang y los demás, y su corazón se llenó de culpa. Fue un general inútil que no sólo no dio a sus subordinados el crédito militar que merecían, sino que además hizo que los encerraran en la cárcel. Aunque ahora han sido liberados, ha oído que todos han sido castigados a trabajar como canteros en las minas de los suburbios del sur.

Si tuviera la oportunidad de ver al emperador de nuevo, ¿podría interceder en su nombre?

Ke Wei Qing dejó su pergamino y entrecerró los ojos algo cansados, pero ¿ con qué cara vería al emperador ......?

*¡Ploc, ploc!* Las palomas han vuelto a acudir en tropel, aparentemente más aficionadas a este suelo aislado que a los majestuosos edificios de la distancia. La singular arquitectura cuadrangular de la biblioteca, y el hecho de que esté tan poco poblada, hace que parezca más un paraíso que un "palacio frío" para funcionarios depuestos.

"¿Eh?" Los ojos oscuros de Ke Wei Qing, tras adaptarse a la luz del sol, miraron hacia el patio delantero. Pero para su sorpresa, se encontró con un Huang Ye vestido de dragón entrando por la puerta. Sólo estaba acompañado por el eunuco en jefe, Li Deyi, y habían entrado en el territorio de la librería.

"Este pecador se inclina ante el emperador, ¡viva, viva, viva!" Antes de que Ke Wei Qing pudiera dejar su libro, bajó los escalones y se arrodilló en el agrietado suelo de piedra verde.