La Atrevida Esposa del Sr. Tycoons 2

Capitulo 258: Arrebatando el fenix

Wei Hantao fue el primero en llegar al restaurante ya que había llegado diez minutos antes. El dueño del restaurante salió inmediatamente a saludarlo, porque era el hijo de Wei Zhongrong.

"Es un honor servirle hoy, Sr. Wei". El dueño, un abuelo amable de rasgos suaves, se acercó a la entrada donde estaba el joven. Era una vista encantadora cuando el sol brillaba sobre él y muchos de los transeúntes mantenían sus ojos pegados a él. El propietario creía personalmente que de todos los hijos de Wei Zhongrong, solo este podía heredar sus ojos.

Wei Hantao se quitó las gafas de sol y sonrió. "Gracias por aceptar mi reserva con un aviso tardío, especialmente cuando estás lleno hoy".

"Tonterías. Por favor, no me agradezca, Sr. Wei. Nada nos agrada más que tenerlo aquí."

La sonrisa de Wei Hantao se amplió ante sus palabras mientras asentía con la cabeza. Un coche discreto se detuvo junto a la acera junto a él. En el momento justo, el conductor salió, abrió la puerta y salió la mujer que atormentaba su mente día y noche. Ella era fascinante con un vestido color crema. Sus pequeños destellos de piel le hicieron preguntarse qué podría haber debajo de la tela fluida. Hoy estaba vestida con mucha elegancia, como una hija preciada y escondida de una familia noble. Su cabello estaba suelto y parecía ligeramente ondulado.

"Llegaste antes de lo esperado." Zhao Lifei comentó cuando se acercó a él.

Los ojos del dueño se agrandaron cuando la vio. ¡Esta era la nieta de Zhao Moyao! Se apresuró a señalar a los empleados que estaban aquí para que se comportaran de la mejor manera. Con miembros de la familia de dos potencias aquí, un solo error podría significar el fin del legado de su familia.

El propietario hizo señas a un gerente para que los guiara a una habitación privada. Era espacioso y adecuado para una gran fiesta. Un camarero les ayudó a sentarse y una camarera vestida con un qipao blanco y dorado se acercó a ellos con el menú.

Wei Hantao pidió una tetera recién hecha de té de crisantemo y una variedad de platos pequeños. La camarera se volvió hacia Zhao Lifei quien negó con la cabeza, "Eso es todo". La camarera asintió con la cabeza y salió de la habitación. No menos de cinco minutos después, regresó con una tetera de arcilla púrpura que tenía un tono encantador cuando la luz la iluminaba.

Wei Hantao se sirvió el té él mismo, pasando la primera taza a Zhao Lifei mientras tomaba la segunda.

Zhao Lifei no planeaba quedarse allí por mucho tiempo, por lo tanto, no ordenó nada de comer. "Voy a ir al grano de la discusión del almuerzo de hoy".

Wei Hantao le hizo señas para que continuara. Levantó la taza de té con las dos manos y tomó un sorbo.

"¿Me ves como una mujer o una amiga?"

PFT!

Wei Hantao casi escupió el té con sorpresa. Se golpeó el pecho y agarró la servilleta más cercana. De todas las cosas o preguntas que esperaba que ella le hiciera, no era ésta. Dejó la taza de té y soltó una carcajada, pero pronto se calmó cuando vio lo seria que estaba.

"Te veo como una mujer". Dijo en voz baja, juntando las manos frente a él. Sentado junto a la ventana con marco de madera con soportes entrecruzados y cubiertas de papel fino, la luz del sol realzaba sus rasgos.

La mirada de Zhao Lifei se posó en su taza de té. Yang Feng tenía razón. Sus dedos se clavaron en sus palmas cuando la culpa se apoderó de ella.

"¿Cuándo planeas contarme esto?"

Wei Hantao deseaba no verse tan molesta por esta noticia. Fue una bofetada en su cara, especialmente después de estar enamorado de ella durante tanto tiempo. Fue paciente cuando ella era la prometida de Zheng Tianyi, y continuó siendo paciente cuando se convirtió en la mujer de Yang Feng. Quería encontrar la oportunidad perfecta, pero en algún momento del camino, la había perdido.