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Capítulo 152: Cara Cacheteada (2)

"Está bien, pospondré tu trabajo".

"Gracias, ge." Al escuchar las palabras de Yu Xin, Yu Qinghuan inmediatamente levantó la cabeza y lo miró sonriendo.

Yu Xin se quedó mudo. "¿Estabas ... fingiendo ser miserable frente a mí?"

"Por supuesto que no", Yu Qinghuan inmediatamente asumió una cara inocente.

No se dio cuenta de que su actitud hacia Yu Xin se había vuelto mucho más relajada. Incluso había aplicado inconscientemente todo tipo de trucos mezquinos que nunca se usarían frente a otros frente a su corredor.

"No me ocuparé de tus asuntos". Yu Xin miró a Yu Qinghuan con los ojos en blanco y se levantó para ordenar la casa.

Por la tarde, Zhao Rui llamó a Yu Qinghuan y le dijo que invitaría a este último a cenar.

Yu Qinghuan estaba libre por la noche e iba a llevar a Huo Qu a comprar un nuevo teléfono móvil, así que aceptó la invitación.

Por la noche, fue al instituto de investigación para recoger a Huo Qu y lo llevó directamente al centro comercial.

El teléfono de Huo Qu se perdió, lo cual no fue gran cosa. De todos modos, sin contraseña, el ladrón no podía usarla, por lo que no temían que la información se filtrara.

Pero Huo Qu no estaba contento. Guardó todos los mensajes e información durante tanto tiempo, y ahora todos habían desaparecido.

Yu Qinghuan lo consoló durante mucho tiempo y le prometió que le enviaría mensajes con frecuencia. Solo entonces el profesor Huo estuvo seguro.

Temiendo que Huo Qu no se sintiera cómodo con un teléfono nuevo, Yu Qinghuan le compró el mismo modelo de su teléfono celular anterior. Cuando llegó a la caja designada, desempacó el paquete y le entregó el nuevo teléfono celular a Huo Qu, "Vamos, pruébalo".

Huo Qu solo tenía un requisito para su teléfono móvil, es decir, poder contactar a Qinghuan y buscar su información. Al ver que Weibo había sido descargado, ingresó el número de Yu Qinghuan y lo guardó en su nuevo teléfono.

Su cabeza inclinada y su escritura lenta se veían tan lindos que Yu Qinghuan no pudo evitar querer burlarse de él, "¿No puedes memorizar mi número? ¿Por qué todavía tienes que guardarlo? "

La mejilla de Huo Qu estaba rojiza, "Debería salvarse".

Yu Qinghuan continuó interrogando con un corazón malvado, "¿Por qué?"

Lentamente giró la pajita insertada en el jugo de maíz que tenía en la mano y arqueó las cejas. Sus ojos se posaron en el rostro de Huo Qu como pequeños ganchos. Cada mirada era conmovedora.

El corazón de Huo Qu latía rápido y su rostro casi ardía.

No sabía por qué insistió en guardar el número de Qinghuan, pero estaba bien obedecer su instinto. Le dio a Yu Qinghuan una mirada rápida y su nuez de Adán se movió levemente.

Yu Qinghuan todavía insistió en preguntar: "Huo Qu, ¿por qué no hablas? ¿Estás ... Um ... "

La pajita en el toque de los labios de Qinghuan fue tirada hacia abajo sin ceremonias. Huo Qu extendió las manos para doblar la cabeza, y luego sus labios bloquearon severamente la boca chirriante de Qinghuan.

En este momento, la puerta se abrió de repente y Zhao Rui llevó a Wang Ruirui a la habitación. Al ver la escena, rápidamente cubrió los ojos de la niña y les gritó a los dos: "¿Pueden ustedes dos prestar atención?" 

Al ser atrapado en el acto, Yu Qinghuan se sintió un poco avergonzado. Tosió y tomó a Wang Ruirui en sus brazos de manera antinatural, fingiendo no escuchar a Zhao Rui. Inclinó la cabeza y saludó a la niña, "Ruirui, ¿cómo estás?"

"Estoy bien. Qinghuan y Huo Qu, ¿qué hay de ustedes dos?" Después de tanto tiempo de ausencia, Wang Ruirui todavía los sentía familiares. Sus grandes ojos sonrientes los saludaban.

Zhao Rui la crió con todo su corazón. La niña vestía una cazadora rosa con la cara roja y un brillo saludable. Ella se veía encantadora. Yu Qinghuan no pudo evitar besar su carita regordeta, y su corazón se agitaba.

¡La niña era tan adorable! ¡Cómo deseaba robarla!

"Hermano Qinghuan", Wang Ruirui se tocó la cara, levantó la cabeza y miró a Yu Qinghuan con un par de grandes ojos negros, "¿Por qué me besaste?"

Yu Qinghuan dijo sonriendo: "Porque me gustas".

Después de una pausa, se encontró con la mirada sombría y asesina de Zhao Rui y rápidamente agregó: "Pero Ruirui debe recordar que nadie más puede besarte, ¿de acuerdo?"

Wang Ruirui asintió con la cabeza, "El tío Zhao Rui me dice esto todos los días".

La niña se apoyó en los brazos de Yu Qinghuan y volvió la vista varias veces entre él y Huo Qu. De repente, ella dijo: "¿Besaste a Huo Qu porque también te gusta?"

Yu Qinghuan, "..."

¡Sospechaba seriamente que Wang Ruirui era un espía enviado por Huo Qu!

"Bueno ..." Quería usar su as de cambiar de tema, pero accidentalmente se topó con los ojos oscuros de Huo Qu.

Yu Qinghuan tragó un bocado de saliva y dudó durante unos segundos. Luego se rindió y finalmente escupió las pocas palabras con dificultad: "Bueno, sí".

Un par de hoyuelos se revelaron inmediatamente las tímidas mejillas de Huo Qu. Afectuosamente sostuvo los dedos de Yu Qinghuan de debajo de la mesa y sonrió con satisfacción.

Después del interludio, miraron el menú para pedir comida y conversaron durante la cena.

Yu Qinghuan le dijo a Zhao Rui sobre el respaldo de Kenn, "Pero puede que no tenga ninguna posibilidad. El hermano Xin me instó a recibir otro nuevo respaldo, y todavía tengo que prestar atención a las nuevas oportunidades ".

Al escuchar esto, Zhao Rui chasqueó la lengua y dijo con regodeo: "Oh, parece que tu buena suerte está llegando a su fin. ¡Siento lástima por mis 50.000 yuanes! "

Yu Qinghuan, "..."

¿Sería demasiado tarde para desafiar a este hombre?

De repente, el teléfono en la mano de Qinghuan sonó de repente. Lo cogió y miró la pantalla. Resultó ser Lu Feng, "Sr. Lu?"

La fría voz de Lu Feng vino del micrófono. No había suavizado su tono incluso cuando dijo buenas noticias: "Qinghuan, ¿estás disponible mañana? Ven a nuestra empresa a firmar el contrato. Felicitaciones por convertirse en el portavoz de Kenn Passion Series ".

Zhao Rui, que estaba a punto de tomar una copa para celebrar el final de la suerte de Qinghuan, "..."

Le pareció oír el sonido de su rostro hinchado por una sucesión de bofetadas ... (*Creo que ya deberías saber que este koi tiene toda una vida de buena suerte por derrochar)