Dos algodones de azúcar sabor a... ¿prohibido?

Capítulo 4 | Los escudos - Parte 1

¡Hola, prohibid@s! 👋 ¿Cómo están?

Como se pudieron dar cuenta por el título, este capítulo 4 ha sido divido, y les comunico que solo lo he divido en dos partes. ¿Festejamos o nos asustamos? 🤭.

Soy consciente que a algunas personas no les gusta los capítulos largos. Por eso, he decido dividir algunos capítulos en dos partes. Cabe mencionar que, cuando escribo, dejo que mis dedos tecleen sin control cuando la inspiración llega a mí, y esa es la razón de que en los primeros nueve capítulos se encontrarán con capítulos un poco largos. 

Yo busco que disfruten esta historia como yo lo hago, tanto como escritora y lectora. 

Bueno, ya no les quito más tiempo. ¡Los quiero mucho! ❤️.

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❃ MADISON ❃

"Así que le gusta decir Dracarys cuando monta", ese fue mi torpe pensamiento cuando Chiara dijo que Juego de Tronos es su serie favorita.

Estoy enterada de ello desde que la empezó a ver por primera vez, y eso fue hace aproximadamente cuatro años.

Recuerdo que con la voz temblorosa me pidió ver la serie juntas, pero con un pesar en mi interior tuve que rechazarla, aunque ella no lo notara, ya que... no me atreví a ver la escena de desnudos con ella a mi lado.

Mi primo Javier ya me había contado algo sobre esa serie, y las escenas eróticas no habían pasado de sus detalles.

Ahora que lo pienso, me hubiese gustado ver el rostro de Chiara cuando se encontró con dichas escenas por primera vez. ¿Habrá pasado de ellos o se habrá quedado mirándolas con mucha atención?

En ese entonces Chiara era la chica más inocente del planeta Tierra. Ahora no sé si aún lo siga siendo. Aunque, si soy sincera, no metería las manos al fuego por su inocencia.

Las más tímidas suelen guardar varias sorpresas.

"So fine" de We The Lion se reproduce a través de los audífonos, mientras aún continúo con los ojos cerrados, porque no pienso permitir que estos se queden clavados en Chiara por un tiempo indefinido.

¿El señor Pérez no puede manejar más rápido?

¡Maldición!... Tenerla cerca es una completa tortura que disfruto en mi interior.

Hace mucho tiempo acepté lo que siento por Chiara, algo que provocó que la detestara más de lo que ya hacía, porque empecé a verla de una manera especial.

Chiara fue traída a mi vida para quererla como una hermana, pero jamás, ni por un segundo, la vi como tal. Para mí siempre fue la hija del esposo de mi madre. Claro, eso la convierte en mi hermanastra; sin embargo, para mí solo fue una persona más en mi vida.

Así fue hasta que... llegué a la adolescencia, supe que me gustaban las mujeres, y como la vida parece amarme demasiado, sentí atracción por una chica de melena rubia y ojos esmeraldas.

Quizá eso tuvo mucho que ver con que jamás la vi como parte de mi familia, y siempre la vi como una chica más. ¡O qué se yo! Solo sé que, desde los 15 años, dicha atracción evolucionó y se convirtió en algo más fuerte y profundo que cualquier gusto superficial.

Sé que entre Chiara y yo jamás sucederá algo. No voy a negar que eso me tranquiliza, ya que estar juntas sería una completa locura. Sin embargo, una molestia se implanta en mi corazón cuando a mi mente llega la idea de Chiara uniéndose a alguien más.

Ya sucedió años atrás, cuando se hizo novia de su mejor amigo.

Fue insoportable y doloroso verlos juntos, y por eso, durante esos meses, pasé más tiempo en la casa de mi padre, porque ya me daba nauseas verlo todos los días en nuestra casa.