Dos algodones de azúcar sabor a... ¿prohibido?

Capítulo 65 | Reconciliaciones y despedidas

Todos sienten la esperanza de que muy pronto atraparán al culpable de aquellos as3sinatos en serie.

Claudia siente que al fin su amiga tendrá justicia.

Fabián toma asiento, aun recordando la reciente y extraña conversación con Thomas.

Los chicos lo notan extraño y desean saber la razón.

─¿Sucede algo? ─dice Javier.

Fabián, que está sentado a su lado, sale de sus pensamientos y fija su mirada en Javier, sintiendo las miradas de sus amigos sobre él.

Fabián abre la boca para contarles, pero es interrumpido por la presencia de las meseras.

Los chicos esperan a que las meseras coloquen sus pedidos sobre la mesa en orden. Cuando al fin se marchan, Fabián carraspea y todos le ponen atención.

El jovencito les cuenta absolutamente todo desde que llegó a la barra hasta que Thomas se marchó, mientras que los demás chicos reaccionan con gestos a cada palabra suya.

─Sospecho que es homofóbico ─dice Fabián.

─¿El vecino Thomas? ─dice Claudia con el ceño fruncido ─. No puedo estar segura de eso, porque yo pienso que su interés romántico es el vecino Alberto.

Todos, absolutamente todos los chicos, la miran boquiabiertos.

─¿Con Alberto? ─Fabián la mira como si fuera una demente.

─No me miren así ─dice Claudia ─, porque tengo mis razones para creer eso.

─¿Y cuáles son? ─dice Madison.

Claudia toma aire con fuerza y luego lo suelta lentamente. Mira a cada uno de ellos, y como si se tratara de algo confidencial, apoya sus brazos en la mesa y se inclina un poco hacia adelante.

─Me he dado cuenta de que el vecino Thomas frecuenta mucho esta cafetería y en varias ocasiones que lo he encontrado aquí, he visto que observa mucho al vecino Alberto. ─Claudia vuelve a enderezarse y con una sonrisa en su rostro se pone todo su lacio cabello marrón hacia atrás ─. Incluso, cuando fue el cumpleaños del vecino Alberto, vi que le trajo un regalo a la cafetería. El señor Thomas se lo entregó con la seriedad que le caracteriza y el vecino Alberto sí se lo recibió siendo muy amable como siempre.

Claudia aguarda por algún comentario de los chicos, mientras que ellos cruzan miradas de sorpresa.

Ninguno imaginó que fueran tan íntimos o cercanos como para obsequiarse algo en una fecha importante.

─Pensé que no se llevaban bien ─dice Madison ─, ya que ahora todos ponen al señor Thomas como el vecino ejemplar, lo que le quita atención al vecino Alberto.

─Bueno, podría ser un enemies to lovers ─dice Chiara, y todos la miran anonadados, excepto Claudia.

A ella sí le gusta mucho esa idea.

─Quizá el señor Thomas está buscando conquistar al señor Alberto ─dice Chiara.

─Ahora que los analizo bien a ambos, sí. Puede ser ─dice Madison.

─Cuando Francisco dijo que posiblemente Alberto esté en una aplicación de citas ─dice Fabián ─, el señor Thomas respondió a la defensiva.

─¿Habrán sido celos? ─Daniela sonríe.

─Ahora pienso que sí ─dice Fabián como si hubiera descubierto un secreto ─. Eso explica la razón por la que Alberto rechaza a las vecinas que siempre han querido estar con él. ¿Cómo podría fijarse en ellas si es gay?