Capítulo 24 | Más que lo suficiente

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MADISON

El día de San Valentín es una fecha en la que muchas parejas lo celebran a lo grande, y otras optan por algo sencillo, pero simbólico.

Otros también lo ven como un dolor de cabeza, porque no saben qué obsequiarles a sus parejas. Sin embargo, existen otros que no solo se preocupan por sus relaciones sentimentales, sino también por sus amistades..., y en este momento estoy dentro de ese grupo de personas.

Hace dos días me llegaron todos mis pedidos, y ayer, después de llegar de la universidad, me encargué de envolverlos. No es que sea demasiado detallista, pero lo soy cuando estoy motivada. Así que, para este día felicité a cada una de mis amistades en mis historias de Instagram.

¿Un poco fuera de mi estilo? Sí. Nada usual viniendo de mí, pero simplemente cuando desperté esta mañana, me entraron esas ganas inmensas de presumirles mis amistades a todo el mundo.

También, publiqué unas fotos con mi madre y mi padre, dos seres que adoro con el alma.

Fabián, Javier y Daniela me enviaron mensajes por mi publicación en Instagram, y también expresaron lo agradecidos que están por tenerme en sus vidas.

No voy a negar que leer sus mensajes me pusieron más contenta. Sin embargo, lo que me hizo reír de la emoción fue el hecho de que Chiara viniera a tocar mi habitación para expresar lo que siente al tenerme como amiga. El abrazo que me dio ni bien le abrí la puerta fue mi mejor obsequio mañanero.

Desayunamos, junto a mi madre, en un ambiente demasiado lleno de vida. Me sentí tan feliz, agradecida y dichosa como nunca.

Al terminar de desayunar, mi madre inició con la entrega de sus obsequios. Chiara y yo le agradecimos muy sonrientes. Luego seguí yo, y les di su obsequio a ambas.

No pude dejar de estar atenta a la reacción de Chiara, y mi sonrisa se agrandó al verla tan emocionada por los Funko pop de Juego de Tronos.

Durante todos esos días que estuve en su habitación, me di cuenta de que algo faltaba en sus diversas decoraciones. Como sé cuál es su serie favorita, toda una semana estuve buscando varios obsequios relacionados a ello, y en una ocasión que visité a Fabián, lo encontré ordenando sus Funko pop de los Avengers. Entonces, mi mente se iluminó y dije en voz alta: "¡Ya sé qué le obsequiaré a Chiara!". Fabián me miró asustado, pensando que obsequiaría sus Funko pop.

¡Pobre Fabián! Casi le causas un paro cardiaco.

El paro cardiaco casi me lo causan a mí cuando Chiara se abalanzó sobre mi cuerpo y me humedeció el rostro con sus delicados besos.

Tuve que controlar mis emociones.

A mi madre le puso muy contenta vernos muy unidas; así que, aprovechó en tomarnos fotos al vernos abrazadas. En ese momento, de nuevo sentí esa punzada de culpa, ya que recordé que, para mi madre, yo veo a Chiara como mi hermana.

Cuando creí que la alegría en mi interior se desvanecería, Chiara me entregó su obsequio. El hermoso cartel que contenía todas las fotos divertidas que nos tomamos en su habitación y la carta escrita a mano, me recordó que, aunque me cueste verla como una hermana de sangre, sí puedo verla como una amiga.

Me pregunto si a ella, al igual que a Fabián y a Daniela, ¿la podré ver como mi hermana de otros padres?... Hace mucho tiempo hubiera dicho que no, pero si ahora soy sincera, mi amistad con Chiara me brinda mucha dulzura y calidez...

¡Pero aún te sigue acelerando el corazón! Aún tus deseos siguen intactos...

Gracias por recordármelo, conciencia.

Dos algodones de azúcar sabor a... ¿prohibido?Where stories live. Discover now