Dos algodones de azúcar sabor a... ¿prohibido?

Capítulo 21 | ¡Sorpresa!

Hoy es un día muy especial para Fabián y las personas que lo aprecian, porque el día de hoy, 04 de febrero, cumple un año más de vida.

Fabián decidió celebrar sus 19 años con una fiesta al lado de sus amigos, vecinos amigables y familiares. Lo que no sabe es que esta noche tendrá una gran sorpresa, y su madre está muy emocionada por ello.

Esta noche también conocerán en persona a Emilio, el novio de Daniela. Formalizaron su relación hace una semana, y Fabián no tuvo ningún problema en invitarlo a su fiesta. 

Al igual que Madison, quiere conocer más al español.

Faltan muy pocas horas para que llegue la noche, y Emilio se encuentra igual de emocionado. Está contento por no tener el día de hoy ningún compromiso de trabajo. Así que, puede compartir más tiempo con Daniela, y también con las personas que ella aprecia.

Madison y Chiara también ya se van alistando. En un par de horas Madison termina, y sale de su habitación con dirección a la de Chiara. Ella le abre la puerta con un rostro de cansancio y el ojo manchado por el delineador negro.

Madison se ofrece a ayudarla, e ingresa a la habitación de Chiara. Ella le explica que lleva más de quince minutos tratando de delinearse los ojos, pero no ha podido lograrlo por su mal pulso. Madison le dice que ya llegó ella para salvarla. Así que, empieza a maquillarle los ojos.

Es inevitable que ambas no sientan cosquilleos por todo el cuerpo al estar tan cerca. Chiara trata de calmarlos, aunque disfrute tanto de las manos de Madison tocando su rostro. Mientras tanto, Madison busca callar a su corazón y a su conciencia para poder enfocarse solo en maquillar a Chiara y no en los labios que quiere besar.

Madison termina de maquillarla, y Chiara le agradece con una sonrisa. Madison toma distancia, pero sin dejar de ver todo de ella. Chiara viste un vestido corto de color marrón claro. Sus sandalias de tacos bajos son de color negro, al igual que la chaqueta que lleva puesta.

Buscando no incomodarla, Madison le dice a Chiara que luce muy bien esta noche, y Chiara sin frenar sus pensamientos, le dice a Madison que ella luce muy preciosa como siempre.

Madison le sonríe, queriendo controlar sus emociones, y se mira en el espejo de Chiara para darle un último vistazo a su atuendo antes de salir de la habitación.

Madison luce muy bien con ese vestido negro y su chaqueta jean, acompañado de sus botines de taco aguja color negro. Chiara le dice que luce de maravilla, mirándola a través del espejo, y Madison se pasa una mano por su lacio cabello negro, mientras sonríe e intenta no ruborizarse.

Quien la viera con las mejillas enrojecidas no podría creerlo.

Madison le dice gracias a Chiara por el cumplido, y juntas salen de la habitación. Se reúnen con Karen en la sala, y ya encontrándose completamente listas, salen de la casa y se dirigen a la de Fabián.

Tocan la puerta cuando llegan, y Fabián las recibe a las tres con un fuerte abrazo. Se emociona al recibir sus regalos. Inés, la madre de Fabián, las recibe también con mucha amabilidad y les invita a pasar al fondo de la casa, donde se encuentra el patio.

Ese espacio fue construido por el padre de Fabián para su familia, un año antes de fallecer en aquel accidente automovilístico. El chico tan solo tenía ocho años cuando su súper héroe favorito partió para no volver.

Karen decide acompañar a Inés a la cocina para ayudarla. Madison y Chiara sí acompañan a Fabián al jardín. Ambas saludan a los parientes de Fabián, y también a los demás chicos y chicas de la zona con los que Fabián juega fútbol y vóley.

Fabián se conoce con todo el mundo. Así que, no será ninguna sorpresa en que el patio se llene en unas pocas horas.

Las cumbias suenan fuertes y provocan que los invitados vayan moviendo el cuerpo.