Dos algodones de azúcar sabor a... ¿prohibido?

Capítulo 37 | Dulce sabor a pecado

Faltan tan solo veinte minutos para que inicie el curso en el que va a exponer Chiara, y ella se encuentra con las manos temblorosas. Chiara las esconde en su blazer blanco para que sus compañeros no se den cuenta.

Chiara y su grupo se encuentran reunidos en la biblioteca, y ella se pone de pie para ir al baño.

Las clases de Madison empiezan dentro de una hora, y esa es la razón por la que hace diez minutos se fue a comprar un té a la cafetería. 

Cuando ella regresa a la biblioteca, se llena de intriga al no encontrar a Chiara con su grupo. Una de las chicas le dice amablemente a Madison que Chiara se fue al baño.

Madison va hacia allá, y al ingresar se preocupa.

Madison encuentra a Chiara mirándose frente al espejo, intentando equilibrar su respiración. Madison se acerca a ella y se da cuenta de que las manos de Chiara no dejan de temblar.

—Hey, despistada. Tranquila —le dice Madison, y con sus manos cubre las de Chiara.

—¿Si no lo hago bien? —dice Chiara.

—No pasará nada. Recuerda que todo forma parte de un aprendizaje. Si te equivocas, la próxima vez lo harás bien, y ya para la próxima vez de la próxima vez lo harás mejor. —Madison le sonríe, y Chiara se lanza a sus brazos —. Aunque sé que hoy lo harás muy bien. Recuerda que te has esforzado para esto, Chiara. No dejes que los nervios te hagan creer lo contrario.

Chiara toma aire, mientras se abriga en los brazos de Madison. Escuchar los latidos de Madison la ayuda a calmarla.

—Sí puedo. Claro que puedo —le dice Chiara, y le da un beso en la mejilla a Madison —. Gracias, mi mosquetera. Ya me encuentro tranquila y con mucho poder en mi interior.

—¡Esa es mi chica! —Sonríe Madison, pero rápidamente se da cuenta de que lo dijo en voz alta.

—Tranquila. Solo somos nosotras dos en el baño —le dice Chiara, y Madison aprovecha en darle un beso en la comisura de los labios.

—Éxitos, mi despistada. —Le sonríe Madison.

Ambas salen del baño y regresan a la biblioteca. Chiara allí aprovecha en tomar el té que le trajo Madison.

Los minutos transcurren y llega la hora de entrar al salón. Madison le da unas palabras motivadoras a Chiara, y ella se aguanta con todas sus fuerzas para no agradecerle con un enorme beso.

Chiara y sus compañeros ingresan al salón, y pasan unos cinco minutos para que el profesor de inicio con las exposiciones. El grupo de Chiara sale primero al frente.

Ximena empieza con el saludo y la presentación del grupo. Luego, ella expone su parte del trabajo. Rita, Jonathan y Lilian hacen lo mismo. Llega el turno de Chiara, y el profesor y la mayoría de sus compañeros se quedan boquiabierto al escuchar una voz dulce tan imponente.

No todo es perfecto, y aun estando un poco nerviosa, ella se trava en algunas partes. Sin embargo, sonríe a los espectadores, repite su idea y continúa exponiendo. Al terminar, Chiara agradece y se escuchan los aplausos.

El profesor felicita a todo el grupo por el buen trabajo en equipo, y ellos contentos regresan a tomar asiento.

Para: Madison💘

¡Me fue muy bien, mi vida!

De: Madison

Me alegro mucho, preciosa. Te veo en la hora de almuerzo.

¡Te quiero tanto!

Para: Madison 💘

Yo también te quiero demasiado 🥰. ¡Nos vemos luego!