Dos algodones de azúcar sabor a... ¿prohibido?

Capítulo 61 | Un pasado y un nuevo inicio

¡Qué tal, prohibid@s! Les comento rápido que este capítulo cuenta con más de 7000 palabras, lo que quiere decir que el capítulo está bien larguito y les recomiendo leerlo en un tiempo libre donde no tengan prisa.

Advertencia: Recordemos que este libro tiene dos minihistorias y un as3sino suelto. Por ende, les suplico no angustiarse si Chiara y Madison no aparecen en un capítulo, porque aún queda más capítulos y obviamente las veremos en cada una de ellas. Así que, no se me desanimen, porque ya faltan pocos capítulos para entrar a la fase final de esta historia.

¡Bueno, ahora sí los dejo! Nos vemos al final del capítulo.

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Ya nada puede seguir siendo igual.

Las redes sociales han explotado en estos últimos dos días.

Algunos influencers y periodistas peruanos han mostrado su malestar e indignación, respecto a los homicidi0s que se vienen acumulando desde ya varios meses. Han reclamado en diferentes redes sociales, pero en TikTok es donde las noticias se han hecho más virales hasta el punto de cruzar fronteras.

Todo esto tiene muy preocupado a muchos, pero una persona en especial es la que desea con todas sus fuerzas acabar con estos homicidi0s, porque le aterra ver cómo los casos incrementan, y le duele ver cómo varias familias están siendo destruidas.

Esas son las razones por las que Fabián está sentado en un avión, rumbo a Cusco, pero sin despegar su mirada de la laptop.

Aún el avión no despega y Javier se encuentra en el baño. Mientras tanto, Fabián reúne información pública de cada homicidi0 para ver cuáles son los distritos donde se han realizado estos. Aunque, realizar no significa lo mismo que encontrar, lo que quiere decir que existe la posibilidad de que el h0micida solo se haya deshecho de los cuerpos de sus víctimas en esos lugares, pero no necesariamente haberlos matado ahí..., ¿o sí?

Bueno, todo esto está investigando Fabián. El muchacho ya va así desde ayer, sábado en la madrugada, anotando los lugares donde vivían esas víctimas, dónde fueron la última vez en que los vieron y dónde fueron hallados sus cuerpos.

Por desgracia, los artículos no informan todo. Así que, eso le da más trabajo a Fabián. Por ende, le genera más estrés.

Cuando Javier lo vio angustiado ayer, quiso cancelar el viaje. Sin embargo, Fabián se negó y convenció a Javier de que no cancelara nada, porque estaba seguro de que Cusco es el mejor destino para mantenerse lejos de todo lo que le preocupa..., pero creo que alguien se lo debe recordar o quitarle la laptop, porque si sigue así no disfrutará nada del viaje.

Actualmente, la comunidad LGBTIQ+ está pasando por un terrible momento, y es normal que Fabián y sus amigos se sientan preocupados, pero tampoco es justo que ellos se limiten y tomen el trabajo que deberían hacer las autoridades.

Fabián no lo sabe, pero las autoridades están cada vez más enfocadas en acabar con esos homicidi0s. Aunque, hasta ahora no han encontrado ninguna huella o algo que los lleve al culpable.

Parece que ese hombre es demasiado astuto como para ser atrapado tan fácilmente.

─¿Cómo vas? ─le dice Javier a Fabián, sentándose a su lado.

─Ya estoy a punto de llegar a una conclusión ─dice Fabián, y pestañea tres veces con fuerza.

Javier suspira fuerte y se recuesta en su asiento. Opta por no decir nada y desvía la mirada hacia el lado opuesto de Fabián.

El muchacho continúa concentrado en su investigación, y pasan unos quince minutos cuando al fin logra obtener lo que buscaba.

─Lo tengo ─dice Fabián, y Javier suspira una vez más, sin mirarlo.