Capítulo 29 | Un gramo de esperanza

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Cuatro días después

Cómo se siente cuando te arrebatan lo único preciado que tienes.

Para los padres de Dayana es tan desgarrador todo lo que sucedió con ella, aquella chica alegre, que buscaba disfrutar cada minuto de su vida y cumplir todas sus metas.

Desgraciadamente, le quitaron la vida y la encontraron al día siguiente de haber asistido a una fiesta.

Ella asistió sin amigos, y hasta el momento sospechan que probablemente tenía una cita y que quizá esa persona es la culpable. Sin embargo, para la esposa del oficial Gutiérrez esto es algo más grave.

Aunque su esposo le haya dicho que, debido a su embarazo, deje de preocuparse mucho por sus asuntos de trabajo, la abogada Silva no puede sacarse de la mente el acto tan atroz que cometieron con Dayana.

Lamentablemente, la joven fue víctima de violencia física y sexual, y murió a causa de un estrangulamiento.

Ya llegó la hora de dormir, y la abogada Silva se acuesta al lado de su esposo.

—Posiblemente, después de muchos años, está volviendo a suceder lo que pasó en Huaral —le dice Silva a su esposo.

Él suspira con cansancio, y mira a su esposa.

—¿Otro asesino en serie? ¿Es en serio? —le dice a su esposa, y ella pasa saliva con fuerza.

Fue en el año 2006, que capturaron al mayor asesino en serie en Perú. Ese hombre aseguró ser un enviado de Dios, que había venido a purificar el mundo. Esa fue su justificación de haber asesinado a más de 17 personas, y entre sus víctimas estaban drogadictos, alcohólicos y homosexuales.

Hasta el día de hoy lo conocen como el "Apóstol de la muerte", y con solo susurrarlo, la abogada Silva siente a todo su cuerpo temblar. Incluso, el bebé que lleva en el vientre empieza a inquietarse.

—No sigas diciendo barbaridades, mujer —le dice Gutiérrez a su esposa, mientras le acaricia la panza —. Las muertes de las dos víctimas no comparten una relación. No hay nada en común.

—Sí lo hay, Mauricio —le dice Silva a su esposo —. Dayana y el chico que encontraron muerto hace un mes pertenecían a la comunidad LGBT+.

El oficial Gutiérrez mira a su esposa con una sonrisa y el ceño fruncido.

—Entonces, ¿ahora toda persona homosexual que muera será por homicidio? —Gutiérrez suelta una pequeña risa —. No tiene sentido.

Silva tras escucharlo, muy enojada aleja, de su panza, la mano de su esposo.

—Solo te pido que recuerdes algo —Silva le dice a su esposo —. Aún hay desaparecidos, y coincidentemente, todos desaparecieron después de asistir a una fiesta.

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01 de marzo

El cumpleaños de Chiara ha llegado y en estos momentos del atardecer lo celebra junto a las personas que la aprecian mucho. Mientras sonríe radiante frente a su torta, en medio del jardín, Madison contempla su alegría.

Chiara se siente tan dichosa al estar rodeada por personas que le muestran un afecto sincero.

La canción del Cumpleaños Feliz se termina, y tras pedir su deseo, Chiara sopla sus diecinueve velas.

Los ojos de Chiara van directos a los de Madison, y su sonrisa se agranda al recordar la nota que vino junto a su regalo.

Todos los años anteriores, Madison le entregaba su regalo a Chiara procurando no tener mucho contacto con ella. Así que, no había abrazos ni besos en la mejilla o en la frente. Solo un frío saludo de cumpleaños. Sin embargo, Chiara no demoraba en esconderse en su habitación y abrir muy contenta el regalo de Madison.

Dos algodones de azúcar sabor a... ¿prohibido?Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang