Capítulo 27 | Sabor a sorpresa - Parte 1

8.9K 596 52
                                    

CHIARA

Ya ha pasado una semana desde San Valentín.

Me hizo feliz ver a mi papá contento con Karen. Sus ojos cada vez que la miran se iluminan de una forma tan cautivadora.

Me pregunto si a mí algún día me contemplarán de esa forma. ¿Algún día llegarán a amarme tanto?

Echo un suspiro, y me quito los audífonos... Basta de escuchar canciones románticas, que me hacen imaginar escenas de amor que jamás viviré... Bueno, no con ella.

Madison... Mi Madison... Mi mosquetera... Mi amiga...

Mi hermanastra..., aquella joven mujer que me hace tan feliz, a pesar de lo triste que se siente quererla como lo hago.

Oh, Chiara, ¿tú la quieres?

Ya no sé si ese es el término que debo seguir usando... Aunque la verdad es que no sé si existen términos exactos para lo que siento por ella.

Con ella siempre eres tan profunda y romántica, Chiarita.

Cómo no serlo si cuando pienso en ella, absolutamente todo fluye..., tal y como sucedió con la carta que le escribí en San Valentín.

Sonrío al recordar el día en que leyó mi carta frente a mí. Fue tan divertido, pero también emotivo.

En verdad estoy agradecida por su amistad. Me siento tan cómoda a su lado. Ni siquiera hacen falta las palabras para sonreír todo el tiempo con ella.

Tuve tanto miedo al pensar que nuestra amistad terminaría y que otra vez volveríamos a ser distantes, después de saber que le gustan las mujeres. Eso no me molesta en lo absoluto, porque siempre querré que ella sea feliz, sin importar si es una mujer o es un hombre.

Tan solo espero que aquella persona la haga tan feliz y jamás se canse de demostrarle lo mucho que la ama.

Sí hubo momentos donde pensé en el futuro, pero acepté que eso es lo que tiene que suceder tarde o temprano, y llorar por lo inevitable no es la opción que yo he tomado.

Ahora tan solo pienso en hacerle sentir tranquila y en confianza conmigo. Le aseguré que no le diré nada a Karen ni a mi papá, y ella también me aseguró que muy pronto se lo contará a su mamá. Lo hará cuando sienta que el momento de hacerlo ha llegado.

Sé que Madison no quiere abrir una brecha entre mi papá y su mamá, pero si eso llegara a suceder, no sería culpa de ella.

Conociendo a Karen apoyaría a su hija, y para ella eso no tendría que afectar su relación con mi papá. Todo seguiría yendo bien y como antes si él no tiene una mala reacción y no decida ser él mismo el creador de aquella brecha.

En pocas palabras, solo es él quien provocaría la brecha con Karen, no Madison.

Vuelvo a echar un suspiro, y recuesto mi cabeza en la ventana del taxi.

Nuestra clase de teatro ya terminó y ahora estoy volviendo a casa en al auto del señor Pérez.

Madison, Fabián y Daniela se quedaron en la universidad, porque tenían un trabajo grupal que hacer con algunos compañeros de un curso que están llevando en este verano.

Transcurren pocos minutos, y llego a casa. Le pregunto al señor Pérez cuánto tengo que pagarle, y él me sonríe.

—La señorita Madison ya me pagó por adelantado —me dice.

Me quedo muda por unos segundos, y reacciono cuando el señor Pérez carraspea.

—Gracias. Que tenga una linda tarde —le digo, y me bajo del auto.

Dos algodones de azúcar sabor a... ¿prohibido?Where stories live. Discover now