Príncipe Mehmed. (Gay)

"Batalla Por El Trono" (5x06)

Tarkan Iskender Aga.

Ayse pasea de un lado a otro frotando sus manos con notable ansiedad.

Del otro lado del Jardín Imperial aparecen más tropas formándose junto a los Jenízaros. Formando un enorme grupo visible desde cualquier punto de las murallas interiores.

–Temo de lo que está sucediendo dentro.
—Habla Ayse.

–¿Ves esas luces en movimiento? —Digo señalando una ventana en el fondo del pasillo del nivel superior.

–Lo veo, Iskender. —Ambos nos alejamos de las murallas para apreciar mejor el Palacio.
–Aquel es el Pabellón De Cristal.

Ayse me relataba el por qué los diferentes nombres de los lugares del Harén. Pero, ¿Por qué habrían sombras en la ventana de personas tan pequeñas? Los únicos de ese tamaño en todo el Palacio son Murad y Bayezid.

–¡Son los Príncipes! —Grito.

Volteo rápidamente y me acerco al comandante.

–Necesito que alguno de ustedes me acompañe, creo saber dónde encontrar a los Príncipes.

–No puedes pretender que toda la caballería te siga. —Dice el segundo Jenízaro al mando.
Me quedo callado e intercambio miradas con Ayse.
–Pero puedes llevar contigo a dos de mis aspirantes.

Antes que pudiese hacer un gesto, dos de aquellos muchachos ya se habían acercado desde la parte de atrás del grupo.

–Nosotros queremos ser honrados con ser su acompañante Tarkan Iskender Aga. —Dicen firmes.

–Muy bien, andando.

Caminamos en dirección opuesta a las entradas principales de la edificación siendo seguidos por las miradas con extrañeza de Ayse y el comandante.

Estos dos chicos dicen querer ser honrados con apoyarme y acompañarme, ¿Saben lo que hablan? A juzgar de su voz casi infantil podría decir que tienen una edad parecida a la mía, no sonaron como adultos.

¿Por qué alguien de mi edad querría ser un guerrero? Todo el día siguiendo reglas, órdenes y mucha disciplina en cualquier acción que tome lugar, debe ser estresante.

Nos acercamos a las murallas exteriores del Palacio por la zona del Jardín de la Laguna.

–¿Qué planea hacer Tarkan? —Pregunta el menor de ellos. Eso es notable, su voz lo delata.

–Nos adentramos de forma ilegítima en el Palacio de su Majestad, ¿Listos?

–Si señor. —Responden al unísono.

Nos hallamos los tres de pie frente a la enorme construcción de dos niveles. El balcón del Sultán se encuentra a dos o tres pilares más allá, nos adentraremos por los Aposentos de Mehmed.

Comenzamos el ascenso, luego de haber guardado nuestras armas en las ropas para evitar que caigan, escalando por las rejas que tienen las ventanas del nivel inferior.

Llegando al segundo nivel, regreso la vista hacia abajo para apreciar a ambos jóvenes que me intentan seguir el paso.

–¿Tarkan, ya había hecho esto antes? Pareciera que no le dificulta.