"Malestar De Iskender" (5x12)

210 20 11
                                    

Tarkan Iskender Aga.

Estando de regreso en el Palacio puedo sentir cómo se agudiza esa pesadez que llevo sintiendo varios días.

Es solo que no he logrado recuperarme bien de las heridas del último conflicto.

Digo esas palabras escuchando lejana la voz de Ayse, que pregunta por qué me encuentro tan distante.

Nos disponemos a dormir y camino hacia la cama sintiendo como si mis pies flotaran, viendo cómo la cama se aleja y se acerca a mí.

¿Estuviste bebiendo? —Pregunta.

No Ayse, no huelo a alcohol.

–Tienes razón, disculpa.

La situación dentro del Aposento se torna muy incómoda. Ella siente que algo extraño sucede, nunca se imaginaria que es por que Mehmed y yo somos amantes.

Tú y yo somos esposos Iskender, solo quiero recordártelo.

El flujo de palabras que corren por mi mente inundan mi cabeza como una enorme ola en el mar azotando la costa, un tormento dentro de mis ojos me impide ver y pensar con claridad.

Y qué con eso. —Digo sin pensar, son solo palabras que salen de mi boca.

¿Cómo que y qué con eso? —Responde molesta.
No seas insolente conmigo Iskender, no pienses ni por un minuto que te lo voy a permitir.

Lo más sensato es disculparme con ella y decirle que ignore mis insultos. Estoy fuera de mí.

Has lo que te dé la maldita gana.
Respondo.

¡Iskender!

–¿Qué es lo que quieres para dejarme en paz?

–Lo único que intento decirte es que quiero un hijo tuyo.

¿Mehmed quiere un hijo mío?
¿Por qué Mehmed me está pidiendo tener un hijo?

¿Crees que eso sea posible? —Pregunto.

Claro que sí, mi Amor. —Responde Ayse, pero con la enorme excepción que es la voz de Mehmed.

Mehmed está confundido, él y yo no podemos tener hijos, yo ya estaría embarazado si fuese así.

Ayse continúa hablando pero permanezco con mis ojos cerrados y solo oigo la voz de mi Príncipe. Es su voz, su única, incomparable e inconfundible voz.
Me está proponiendo tener una noche diferente, otra vez, como en aquella cabaña.

Siento su mano en la mía y al abrir los ojos, veo sus delicadas facciones acercándose a mí.

Por favor bésame. —Digo viendo el rostro de Mehmed.

Claro, esposo mío, soy completamente tuya esta noche.

Mehmed acaba de referirse a él como ella, estoy seguro que es por nuestra conversación de, quién sería la concubina de la relación, y al parecer, acabamos de tener nuestra respuesta.

Príncipe Mehmed. (Gay)Where stories live. Discover now