DURAZNOI HANTAO

Capítulo 80

Y tu... y tu...

Estas dos últimas palabras resonaron en la mente de Chen Ziqi mientras miraba sorprendido a Dan Yi. Las orejas de Dan Yi ahora estaban de color rojo brillante. ¡Este tipo ahora estaba coqueteando escandalosamente con él! Chen Ziqi encontró esto bastante emocionante, y se acercó sigilosamente al tipo de orejas rojas. —¿Cómo planeas comerme?— él susurró.

Dan Yi apretó los labios. —En cuanto a esto, tendremos que preguntarle al anciano Mu— dijo con toda seriedad.

—¿Eh?— Chen Ziqi preguntó confundido. ¿Por qué tuvieron que preguntarle al anciano Mu sobre este tipo de cosas? Chen Ziqi pensó que había oído mal.—¿Por qué necesitas preguntarle al anciano Mu sobre esto?— Después de que las palabras salieron de su boca, se sintió un poco tonto.

¿ Quizás Dan Yi no estaba hablando de esas actividades que se hacían en la cama?

Dan Yi extendió la mano y acarició los labios ligeramente separados de Chen Ziqi, se acercó más y luego le mordió la oreja suavemente. —Me temo que te lastimarás.

Ahora que los dos habían expuesto sus corazones ante el otro, ahora podían hacer todo tipo de cosas, pero Chen Ziqi aún era muy joven, y sintió que era mejor consultar al anciano Mu antes de continuar.

¿Este pajarito pervertido realmente había pensado tanto en esto? Su cálido aliento se enroscó en los canales auditivos de Chen Ziqi, trayendo consigo una sensación de hormigueo que era difícil de describir, y sus oídos no pudieron evitar enrojecerse también. Empujó un poco a Dan Yi y luego se enderezó. —¿Por qué siento que eres realmente diferente del Dan Yi que conocí antes?

Dan Yi solo sonrió, luego tiró de la mano de Chen Ziqi y caminó hacia el bosque de bambú, bordeando los campos plantados.

Las cosas que sabía cuando nació superaban con creces el conocimiento humano de Chen Ziqi. Lo había escondido bien en el pasado porque tenía miedo de asustarlo.

El Pico de Bambú de Jade se dividió en unos pocos sectores. Algunos sectores se especializaron en plantar arroz bambú. En esos sectores, el cultivo que plantaban era un tipo de bambú delgado y esbelto que crecía muy rápidamente. Otros sectores plantaron solo brotes de bambú, y las personas a cargo de esos sectores tenían que cavar para obtener brotes de bambú todos los días. Sin embargo, otros sectores plantaron un tipo de bambú de aspecto particularmente grueso y basto. Chen Ziqi no sabía para qué era ese tipo de bambú.

—¿Estos gruesos tallos de bambú se usan para hacer herramientas o algo así?— Chen Ziqi preguntó con curiosidad, pasando una mano por el tronco de bambú. Su circunferencia era tan grande que se necesitarían dos personas abrazándolo para rodearlo por completo.

Antes de que Dan Yi pudiera responder, un agudo grito de terror vino de un lado. —¡No! ¡No quiero hacer esto!—gritó la voz.

A unos cinco pasos de distancia, algunas personas estaban cortando un grueso tallo de bambú. Con ellos estaba una chica que obviamente era nueva en el trabajo. Tiró a un lado los guantes que le acababan de dar y retrocedió rápidamente, como si hubiera visto algo horrible.

Chen Ziqi se acercó para echar un vistazo. Se consideraba una persona bastante atrevida, pero incluso él se sorprendió cuando miró el tallo de bambú cortado. Un gusano gordo, blanco como la nieve, del tamaño del brazo de un niño, se retorcía ligeramente en el espacio vacío entre las paredes de bambú.

Aparte de la chica que había gritado, las otras personas no parecían perturbadas por la criatura en absoluto. Una persona se puso un par de guantes de manera práctica, luego usó ambas manos para recoger el gusano blanco y gordo y lo puso en una canasta de bambú junto a ellos. En su interior se podían ver dos gusanos más que se veían exactamente como este. Esos gusanos eran muy dóciles y no intentaron escapar en absoluto. Simplemente yacían tranquilamente en la cesta de bambú.