Capitulo 109

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Chen Ziqi sintió una gran lástima por Dan Yi, que parecía ser un niño que no era amado por su madre o su padre. Compró una gran bolsa de semillas de melón tostadas en una tienda para Dan Yi, pensando en romperlas para que las comiera por la noche para animarlo.

Había una tienda de pollo asado al lado de la tienda de nueces que parecía estar haciendo un negocio próspero. Muchas personas se alinearon frente a la tienda, y de estas personas, una persona se destacó en particular: Un joven monje con la cabeza rapada, que debería haber seguido una dieta vegetariana. Tenía la piel muy clara y no había ni una patilla de cabello en su rostro suave y redondo. Se veía bastante adorable, y esta ternura de alguna manera se realzaba aún más por la forma en que su boca se torcía con molestia cada vez que alguien lo miraba.

En realidad, no era inusual que los plebeyos en Luoyang se afeitaran la cabeza, por lo que un hombre con la cabeza rapada que compraba carne no era particularmente sobresaliente en sí mismo. Sin embargo, este joven monje también vestía un hábito de monje, y eso lo hizo realmente destacar cuando hacía cola en un puesto que solo vendía carne.

—Pequeño maestro, ¿Estás seguro de que deberías comprar pollo asado?—alguien no pudo resistirse a preguntarle.

—Tengo dinero, ¿Por qué no puedo comprar pollo? ¿Qué es para ti?— dijo el joven monje, mirando al tipo que preguntó. Aceptó el pollo envuelto en hojas de loto del vendedor, luego giró sobre sus talones para irse. Sus pies calzados con sandalias de paja pisotearon con fuerza el suelo cuando se fue, y estaba claro que todavía estaba enojado.

—La Secta Kongming tiene un pequeño monje bastante interesante—reflexionó Chen Ziqi, las comisuras de su boca se curvaron en una sonrisa mientras observaba al monje desaparecer en la distancia. Basado en los pocos monjes que había conocido este mismo día, había asumido que la Secta Kongming estaba llena de estereotipos de corazones sangrantes que eran demasiado amables para su propio bien. No había pensado que habría un personaje tan divertido allí.

Dan Yi parecía pensativo mientras observaba la espalda del monje en retirada.

A la mañana siguiente, cuando Chen Ziqi se despertó en la cama grande, suave y cómoda, se dio la vuelta para acariciar juguetonamente el pecho de Dan Yi y luego abrió los ojos con gran desgana. La vista que encontraron sus ojos lo confundió un poco. Esta era la sala capitular del Ala del Viento en Luoyang. Lo que le sorprendió fue que todas las salas capitulares del Ala del Viento tenían exactamente el mismo mobiliario y distribución. Incluso las cortinas que colgaban de los postes de la cama estaban hechas exactamente del mismo material con exactamente el mismo corte. Él y Dan Yi habían estado pasando las noches en las salas capitulares del Ala del Viento mientras viajaban, y él a menudo no podía decir dónde estaban porque parecía que se despertaba exactamente en el mismo lugar todas las mañanas.

Se vistió, fue a buscar los caballos a la posada, pensando que era mejor salir temprano.

Cuando el trabajador de la posada vio que los dos regresaban, pareció tambalearse un poco y parecía bastante desconcertado. Después de pedirles a ambos que esperaran un rato, dio media vuelta y salió corriendo a buscar sus caballos.

El posadero salió de detrás del mostrador de recepción con una gran sonrisa en su rostro. —¿Podría preguntar por qué ustedes dos, caballeros, no se quedaron en la posada anoche?— preguntó.

—Nos quedamos con algunos amigos, y todo lo que necesitábamos era un lugar para el establo de los caballos— dijo Chen Ziqi casualmente. Dan Yi claramente no tenía intención de responder al posadero en absoluto.

Entonces, ¡Estos tipos eran en realidad gente rica! ¡Y eran tan ricos que en realidad pagaron una habitación en su posada solo para guardar sus caballos!

DURAZNOI HANTAOWhere stories live. Discover now