Capitulo 104

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El pajarito rojo fue sacudido, tropezó hacia adelante y cayó sobre la nieve. La nieve desplazada voló y colgó de las dos plumas en la parte superior de su cabeza como un pequeño sombrero blanco. Sacudió la cabeza para deshacerse de la nieve, miró al sonriente Chen Ziqi e instantáneamente se transformó en una figura humana y arrojó a Chen Ziqi a la nieve.

—¡Ah!— Chen Ziqi se sobresaltó, y cuando se dio cuenta de lo que sucedió, ya estaba acostado boca arriba en la nieve. Afortunadamente, vestía una capa gruesa con una capucha adherida a ella, por lo que la nieve no le caía por el cuello.

Dan Yi lo presionó, la hermosa ropa roja era tan deslumbrante como un grupo de llamas vigorosas en el hielo y la nieve. Los delicados ojos del fénix se volvieron incomparablemente claros contra el fondo del brillo de la nieve, y la línea inclinada del ojo parecía pinchar los corazones de las personas, haciendo que las personas quisieran acercarse.

Chen Ziqi levantó la mano y trazó ligeramente el borde de su hermoso ojo con un dedo. —Eres tan guapo.— Solo su propia figura se reflejaba en los oscuros y profundos ojos como la obsidiana, haciendo subir la satisfacción en su corazón. Si no se hubieran conocido temprano, nunca habría obtenido este hermoso y poderoso fénix.

Las frías yemas de los dedos acariciaron su rostro, provocando un ligero hormigueo. Dan Yi miró al hipnotizado Chen Ziqi y no pudo evitar sentirse un poco orgulloso. La apariencia de ser apreciado por su pareja era lo más placentero para un pájaro macho, por lo que se inclinó lentamente y besó los labios suaves y húmedos.

El beso abrasador disipó todo el viento helado. La nieve seguía cayendo, pero se creó una pequeña burbuja cálida entre los dos para calentar a Chen Ziqi, que tenía miedo al frío.

Por supuesto, esto en realidad era solo una ilusión temporal, no podían estar en la nieve por mucho tiempo. Después de jugar un rato, Dan Yi levantó al otro, palmeó la nieve en su cuerpo y caminó hacia las profundidades del Palacio tomados de la mano.

En el siguiente par de días que el Emperador Tiande corrió irregularmente, los dos, que no tenían nada que hacer, recorrieron el palacio delantero. También fueron a ver al Sumo Sacerdote en el Palacio Taizhen.

En la víspera de Año Nuevo, se le pidió a Chen Ziqi que siguiera al Emperador Tiande, vistiendo una túnica ceremonial del Rey de seda bordada con un dragón plateado enrollado, y subió paso a paso el Pabellón Zhanghua.

El hielo y la nieve en el Pabellón Zhanghua se habían limpiado hace mucho tiempo, revelando líneas oscuras en el suelo. El Sumo Sacerdote Lan Xiang vestía una túnica azul hasta el suelo, y el dobladillo largo estaba extendido en el suelo. A la luz del sol se podía ver un patrón de telaraña de plumas de pavo real.

El anciano con aire de inmortal, vestido con ropa tan elegante, parecía inmortal e inspirador.

Chen Ziqi recordó cómo el Sumo Sacerdote mostró su ropa nueva en el Palacio Taizhen hace dos días y no pudo sentir el asombro. —Esto fue traído por Shan Yu, se dice que fue hecho por Jiangxue. ¿No es atractivo?

La túnica en la percha mostró un brillo abrasador bajo la luz de las velas, y era hermosa y extravagante.

—Esto se llama 'Abrir las plumas de la cola del Pavo real'—dijo Dan Yi sin expresión.

El viejo pavo real abrio las plumas de la cola por sí mismo.

Mirando al viejo pavo real magníficamente vestido en el centro del Pabellón Zhanghua, la cabeza de Chen Ziqi repetía estas palabras una y otra vez, por lo que no podía hablar en serio.

Después de la complicada ceremonia, el emperador se adelantó para adorar a los dioses. Todos los funcionarios civiles y militares se pararon debajo del Pabellón Zhanghua, esperando que apareciera un milagro.

—Con los colores del cielo y la tierra, Dios bendiga a Dazhang, con tres reverencias, bendiciones para el Emperador.

La vieja voz de Lan Xiang reverberó en el Pabellón Zhanghua con una sensación de desolación y solemnidad. Nubes oscuras se acumularon en el cielo y pesados ​​copos de nieve cayeron uno tras otro. Pronto, una fina capa de nieve cubrió el pabellón Zhanghua, incluso tiñendo de escarcha las túnicas de dragón amarillo brillante del Emperador Tiande. El viento silbaba sobre la alta plataforma sin traer luz ni milagros. Sólo se oían los gritos del viento del norte, como los suspiros de un anciano, o la risa relincha de mulas y caballos, que sabían de qué se reían.

No pasó nada, y el ambiente era un poco incómodo.

El pequeño pájarito rojo salió de la túnica de Chen Ziqi, abrió su pico para sostener un copo de nieve que flotaba frente a él y lo sostuvo hacia Chen Ziqi como si fuera un tesoro.

Chen Ziqi se arremangó a modo de saludo, inclinó la cabeza y besó el pequeño pico puntiagudo. El Dios seguía jugando con la nieve en su abrazo, sería más extraño que apareciera un milagro.

Al final del sacrificio al cielo, el Emperador Tiande miró pensativamente a Chen Ziqi, por lo que parecía que Xiao Qi no era el elegido por el Cielo. Parecía que necesitaba traer a Chen Zimu para probarlo el próximo año.

Después del banquete del Palacio de Nochevieja, Chen Ziqi se despidió y se fue. El Emperador Tiande no lo detuvo, pero los 100.000 taels de plata que dijo antes se habían ido.

—La tesorería está apretada, ¿Cómo hay 100,000 taels para darte? La gente en el jianghu honra la lealtad. Con tu inteligencia, definitivamente podrás pensar en una manera.

Este era el estilo constante del Emperador Tiande de querer que el ganado tirara de los carros sin alimentarlos con pasto. Chen Ziqi frunció los labios y se fue.

En el viaje de regreso, Chen Ziqi todavía estaba enojado sin importar cómo lo pensara. Calculó cómo y cuándo vengarse de Tiande. Dan Yi levantó la vista de los documentos oficiales, vio q su Qiqi hinchado, frunció los labios y se rió entre dientes. Levantó la mano y le entregó una bolsa de piel de venado.

—¿Qué es esto?— Chen Ziqi aceptó y lo pesó.

Lo que tenía en la mano era bastante pesado y se sentía duro, no podía adivinar qué era. Abrió la bolsa de piel de venado, lo agitó y una ballesta bien hecha cayó al suelo del carruaje con un ruido.

En la posada, el Sexto Príncipe de Xiongnu, que había perdido la ballesta, se fue enojado. Estaba claro, solo le mostró esto al Emperador Tiande, y solo el Emperador Tiande lo recordaría. ¡Era evidente quién lo robó!

El Sexto Príncipe enojado salió corriendo de la posada y estaba a punto de entrar al Palacio para darle una lección al despreciable villano, pero fue detenido en la calle.

—Su Alteza Real, mi maestro lo invita a subir y tomar una taza de té—Dos hombres que sostenían espadas largas bloquearon el camino del Sexto Príncipe. Sus cuerpos exudaban débilmente el aura de los maestros, pero sus expresiones eran muy educadas. Levantaron los dedos y señalaron el segundo piso del restaurante donde un hombre estaba sentado junto a la ventana.

El hombre vestía una túnica de algodón de color índigo y su apariencia era algo similar al Emperador Tiande, pero sus cejas y ojos eran mucho más suaves, toda la persona se veía gentil. El Sexto Príncipe entrecerró los ojos y se volvió para subir las escaleras. Esta era una habitación privada. Solo había una persona sentada en la habitación. Cuando lo vio entrar, no se levantó, solo sonrió suavemente:—Este subordinado es Chen Zijian, el Segundo hermano menor del Emperador actual.

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Después de recibir la paloma voladora del joven maestro de la secta Jindao, el rey Wang Zijian también partió hacia la capital y estuvo en la capital durante los últimos días.

—¿Dijiste que viste al Segundo hermano?—En el Palacio, el Emperador Tiande se emocionó al escuchar la noticia. —¡Envía a los guardias Jinwu para atraparlo, asegúrate de atraparlo en el acto!

Era un delito grave que un vasallo abandonara su feudo sin autorización.

Justo cuando estaba hablando, una carta sellada con cera cayó del cielo y se estrelló contra la puerta del salón principal del Palacio Zichen con un estruendo .

—¿Quién?— El emperador Tiande saltó, y un guardia rápidamente recogió la carta y miró hacia el cielo confundido. A excepción de unos pocos pájaros, no había nada más en el cielo. Un par de palabras dominantes y arrogantes estaban escritas en el sobre: 「Confidencial, solo al emperador -Dan Yi」

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