My immortal path ¡Zarak!

Creando Un Plan

El tiempo había pasado volando y el primer mes de Li Shuma fue satisfactorio, encontró mucho información sobre este lugar y por que existían las bandas.

Se podría considerar que esta cordillera era un lugar sin ley, pero también era una ruta comercial. Muchos saqueos ocurrían en este lugar y esto formó la gran parte de las bandas.

La codicia...

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Li Shuma estaba escondido entre las hierbas, en la montaña más alta, en esta se encontraban algunos campamentos de las bandas, eran sus lugares de saqueo.

Está ruta era comercial y los bandidos estaban planeando su siguiente ataque.

Una carga de materiales, tesoros y comidas épicas llegaban una vez al mes a la ciudad más cercana, en el continente Azur no existían países. Sólo ciudades y capitales… las cuales eran las ciudades más prósperas.

Li Shuma ya sabía que esto pasaba cada mes, pudo encontrarlo en el jade de uno de sus cadáveres.

Ya llevaba aquí varios meses, era mitad de año y su sed de sangre había aumentado más y más.

Todos los días era lo mismo, cultivar, asesinar y esconderse.

Sin embargo en todo este tiempo no pudo conseguir ningún tesoro, ya que todos los destruía sin querer en las confrontaciones.

Y sus anteriores tesoros fueron destruidos en batallas, solo le quedaba un pañuelo.

Al estar escondido, encontró nueva información muy útil. Este lugar se le conoce como la cordillera del lobo. En esta cordillera existen cuatro grandes bandas.

Estas bandas se especializan en robar y asesinar, algunas sectas vienen para pedir la ayuda de ellos en asesinatos.

Muy parecidos a los mercenarios, sin embargo más poderosos.

También gracias a esto, sus asesinatos fueron confundidos con conflictos de las otras bandas y así no fue buscado. Ya que las bandas de la cordillera del lobo eran hostiles unas a otras.

Los que roban las cargas como la de este mes son los de más bajo rango, son cultivadores que no están en la establecimiento  de Qi.

Las cargas anuales son encargadas para los cultivadores del establecimiento de Qi, estas cargas traían más objetos preciosos.

Es por eso que eran más difíciles de robar, sin embargo en cada carga habían guardaespaldas que no dejaban que robaran todo el contenido.

Es por eso que en cada carga cientos de miembros de las bandas morían.

Li Shuma se había enterado de esto hace unos cuantos días, su entusiasmo lo había dominado y llegó con un plan muy mediocre.

Era robar y correr.

Sin embargo se dio cuenta que este plan era malo horas antes de que llegara la carga.

Aun así ya no se podía retractar y tan solo podía esperar la mejor oportunidad.

Y así pasaron las horas…

El silencio se apoderó de esta montaña y el sonido de ruedas se escuchaban a lo lejos.

“Ya está aquí...” Li Shuma reprimió su emoción y empezó a empuñar a Sharur más fuerte, un pequeño indicio de codicia apareció en sus ojos.

Sus ojos se posaron en los miembros de la banda que estaban por atacar, eran veinte. Cada uno de ellos con diferentes edades, sus cultivos estaban tan solo en la etapa de la cultivación de Qi.

El nivel más alto era la decima etapa, esto ya era una gran presión para Li Shuma, sin embargo esto no era todo. Cuatro de los veinte también estaban en la novena etapa de la cultivación de Qi.

Otros estaban variados, no obstante no pasaban la séptima etapa.

Li Shuma al notar sus niveles de cultivo sonrió de forma amarga, estas personas ya estaban alertas y tomarlos por sorpresa sería difícil.

Su única opción era esperar a que fueras heridos y tomar los tesoros sin ser visto.

Los sonidos de ruedas resonaron más y más cerca, en unos pocos minutos un pequeño carro de carga estaba  cerca.

Diez cultivadores de la decima etapa  de la cultivación de Qi  estaban cerca del carro de carga, todos tenían una túnica verde y sus miradas eran frías.

Todos ellos eran los guardaespaldas del carro de carga, soltaban un aura sofocante digna de sus experiencias en combate.

El cultivador de la decima etapa de la banda hizo algunas señales y de su bolso espacial sacó un talismán rojo, luego lo lanzó de forma furtiva y este tocó el suelo cerca del carro de carga.

¡Bang!

El carro de carga no podía pasar por el cráter en frente de él, los guardaespaldas  se alertaron al instante y sacaron sus tesoros espirituales.

Al segundo comenzó una batalla a muerte.

Los miembros de la banda se dividieron para comenzar su estrategia, tenían que mantener a la mayoría de cultivadores para que el cultivador de la decima etapa de la cultivación de Qi los ayudará y así robar lo que más pudieran.

Li Shuma aún no se movía, simplemente se quedó allí en su hierbas esperando una oportunidad.

Los guardaespaldas lanzaron sus diferentes hechizos y ya masacraron a dos de los miembros de la banda.

El cultivador de la decima etapa se abalanzó en contra de uno de ellos y le plantó un talismán rojo en la espalda.

Una explosión resonó y uno de los guardaespaldas sufrió una lesión grave, empezó a escupir sangre y su piel se puso pálida. Sin embargo corrió en frente de ese cultivador y de su manga salió una aguja muy, muy grande de veinte centímetros de largo y cinco de ancho.

Su color era negro con azul y se lanzó en contra del cultivador de la décima etapa, la aguja le penetro en pecho y luego su hombro.

La vida de este cultivador fue tomada en unos pocos segundos...

La banda ya perdió a su guerrero más fuerte, Li Shuma miro esta aguja con asombro y su cautela subió un nivel más.

“Si eso me golpea, de seguro moriré…”

Li Shuma se movió un poco y se acerco al carro de carga, no fue visto por nadie y su aura se oculto.

Luego con sus dedo en el suelo recitó alguna palabras.

“¡Derrumbe!”

El suelo empezó a temblar más y más fuerte, todos dejaron de atacar y se concentraron en estabilizarse.

Li Shuma aprovecho esto y con un vórtice entro al carro de carga, este carro de carga era algo grande y contenía muchas cajas adentro, el conductor de este carro parecía  estar muerto ya que no se movía ni un poco.

Li Shuma se acerco de forma suave y toco el cuello del conductor, este no tenía signos de vida.

“¿Esta muerto?” Li Shuma se sorprendió y luego extendió un poco de su aura para encontrar cualquier presencia cercana.

En todo el carro de carga no había nadie, entonces Li Shuma estaba solo… Junto a las cajas llenas de tesoros.