Pasos del final

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La orbe empezó a temblar de manera descontrolada, pero sus manos nunca se detuvieron. Manejaron la energía espiritual de manera eficiente a un punto que era aterrador.

¡Plop!

La orbe se detuvo… Pero la sangre que había estado sobre ella se empezó a convertir lentamente en una forma, esa forma era la de unos ojos. Esos ojos parecían estar inactivos pero Li Shuma sintió que eran muy activos.

“Lo logré…” Soltó un resoplido extraño y sus ojos se llenaron de cansancio, usar la esencia de sangre no era un asunto fácil. Al usarla no tenía medios de recuperarla. Era un poder que era limitado y no se podía usar de manera casual. Era claro que Li Shuma había pagado un gran precio al usar tanta esencial de sangre. Había perdido casi la mitad de su reserva.

“Espero encontrar una forma de recuperar algo de esencia” Li Shuma empezó a sudar y sus ojos estaban por cerrarse, pero se detuvo a mitad de camino cuando noto que en la distancia había una gran ciudad. Parecía ser una fortaleza ya que habían miles de cultivadores que estaban una muralla majestuosa.

Y no sólo eso, en ese momento un aura majestuosa empezó a emanar del cuerpo de Li Shuma. Era como si algo dentro de su ser hubiera cambiado…

Li Shuma sintió este cambio, pero no sabía que significará. No sentía que tuviera más fuerza, era solo el sentimiento de poseer algo nuevo que antes no estaba, como si un niño consiguiera la capacidad de hablar y estuviera encantado.

“Bienvenido” Ed Lauk apareció cerca de Li Shuma, con un solo vistazo se podía notar que ahora tenía mucho más poder que antes.

Li Shuma asintió y entró rápidamente en la ciudad. No se molesto en despertar a los demás de su cultivo y los dejó en un lugar apartado antes de ir y revisar la situación en la ciudad, gracias a que Ed Lauk era el nuevo líder de la ciudad, podía ir tranquilamente a cualquier lugar y revisarlo sin tener que pasar por supervisión.

“¿Hay infiltrados?” Li Shuma preguntó mientras volaba para ir a ver los nuevos reclutas.

“Todos fueron eliminados, habían algunos que ocupaban un cargo alto. Pero no escaparon de mi vista” Respondió Ed Lauk de manera casual, Li Shuma solo lo miró de reojo antes de tocar su frente.

“Tenemos poco tiempo, reúne a los altos cargos ¡Tenemos que prepararnos!” Li Shuma ordenó rápidamente y luego se dirigió a él edificio más alto. Ahí era donde se hacían las reuniones en la ciudad.

Un edificio grande y majestuoso, tenía una sala muy espaciosa. Había una mesa bastante grande que tenían sillas alrededor. Era como una gran sala de conferencias.

Li Shuma se sentó en una silla cualquiera y empezó a cultivar. Ed Lauk sonrió y sacó un jade de su mano. Empezó a enviar mensajes hacia toda la ciudad de una manera rápida y eficiente. En unos solos segundos había terminado de comunicarse con los altos mandos.

Después de eso se sentó en una silla que estaba adornada, precia ser la silla que usaba habitualmente. A diferencia de las otras sillas que eran muy simples.

Y así pasaron unos minutos antes de que llegan varias personas a la sala. Todos tomaron sus puestos y esperaron mientras entraban los demás.

Después de cinco minutos estaban todos, menos una persona. La cual se podía notar que no asistía mucho ya que la silla parecía tener algo de polvo.

“¿En donde está la última persona?” Li Shuma preguntó por un mensaje mental hacia Ed Lauk, este sonrió y parecía algo nervioso.

“Es… La gran promesa de la ciudad. Tiene el mejor talento que he visto y en tan solo unos pocos años ha logrado llegar al ápice del núcleo. Solo pasarán algunos meses antes de que sea un cultivador del alma ¿No crees que es sorprendente?” Ed Lauk respondió rápidamente, sus ojos estaban brillando ya que estaba algo nervioso, había consentido mucho a una promesa.

Li Shuma entrecerró sus ojos y luego soltó un resoplido, sus ojos brillaron con una extraña sensación que hizo enfriar la habitación. Todos abrieron sus ojos incluidos los cultivadores del alma que se habían reunido hace bastante tiempo.

¡Ba!

Una puerta se abrió y salió un joven de apariencia juvenil, rasgos finos y con una mirada arrogante que sobresalía sin siquiera intentarlo.

“Estaba cultivando y me tome un poco el tiempo ¿Ya comenzaron?” El joven habló mientras sonreía, sus ojos brillaban con un extraño sentimiento que emanaba poder.

Ed Lauk no perdió el tiempo y luego empezó a explicar que se tenían que preparar para lo peor, varios cultivadores empezaron a dar sus propias ideas y crearon un plan entre todos. Menos lo Shuma y el joven arrogante.

Li Shuma mantuvo sus ojos cerrados todo este tiempo, pero la habitación sólo se hacía más fría mientras pasaba el tiempo, Ed Lauk tuvo que usar su energía espiritual para frenar la temperatura en la sala.

¡Ba!

El joven arrogante golpeó la mesa y luego bostezo, sus ojos tenían algunas lágrimas. Al parecer tenía mucho sueño.

“Lo siento, no me descansado muy bien. Me iré antes” Dijo el joven mientras se levantaba de su silla, luego le dirigió una mirada extraña a Ed Lauk quién lo miraba con una expresión amarga.

Li Shuma abrió sus ojos y miró al joven que se estaba acercando a la puerta de salida. Todos habían notado que Li Shuma era algo extraño ya que no había hablado desde que comenzó la reunión.

“¡Siete minutos, Una hora!” Li Shuma habló lentamente, su voz era muy gruesa en ese momento y sus ojos se llenaron de ira. Había contado los minutos que se había demorado en llegar el joven arrogante y cuanto había durado la reunión.

El joven dejó de caminar y una extraña sonrisa apareció en su rostro. Era claro que se había enfadado igual.

Li Shuma se levantó de la silla y camino lentamente hacia el joven arrogante, la ropa de Li Shuma empezó a revoletear. En un segundo se encontraban de frente.

“¿Tienes algún problema?” El joven arrogante habló lentamente, su poder empezó a desbordarse y se podía notar que estaba en la cima del núcleo.

“¡Arrodíllate!” Li Shuma no respondió la pregunta, sólo movió su mano y un poder extraño empezó a golpear el cuerpo del joven arrogante, era como si una fuerza extraña lo estuviera reprimiendo.

“¡Rápido!” Li Shuma movió su mano otra vez, pero esta vez el joven arrogante no pudo resistirse y termino en una posición de sumisión. Li Shuma puso su pierna derecha sobre la cabeza del joven arrogante y una sonrisa macabra apareció en su rostro.

Ed Lauk parecía querer intervenir, pero por alguna razón sintió que Li Shuma era peligroso. No tenía que ver con el cultivo, era algo más.







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