8. El diario de James

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Debía regresar a la escuela. Pero estaba bien, tenía un plan. Deseaba vengarme de Stefan. Y eso haría.

Clint pasó por mí muy temprano. Su humor se veía mejor. Yo me sentí genuinamente un poco avergonzado cuando lo vi porque después de año nuevo estuvo muy ocupado y no nos habíamos encontrado desde entonces. Subí al auto. Bran y Rocky me saludaron. Jack sólo me sonrió. Ignoré a Stefan.

Llegamos a la escuela. Fuimos a nuestros grupos. Stefan me siguió. Se sentaba a mi lado pero lo ignoré como si no estuviera ahí. Hablé con mis otros compañeros bastante en ese día.

Llegó el receso. Fui a la fuente. Stefan me siguió. No había nadie hasta que Jack llegó. Le sonreí. Le pregunté si tuvo un buen inicio de año. Dijo que descansó bastante en año nuevo así que no podía quejarse. Era porque Clint no lo molestó. Me sentí mal por eso. Yo no quería haber tenido sexo con Clint, a mí me gustaba Jack pero era lo que debía sacrificar. Además mi venganza también sería en su nombre. Jack no se merecía lo que le pasó. Pero yo me encargaría de eso.

Bran y Rocky llegaron. Parecían muy felices y me contaron que era porque Clint les dijo que no le importaba lo de las peleas. Así que oficialmente tenían permiso y jamás en sus vidas creyeron que algo así pasaría.

— De verdad eres un rey— me dijo Bran mientras me hacía una reverencia—. Majestad, no te merecemos.
— No digas eso— dije un tanto avergonzado.
— Pero es cierto— dijo Rocky—. Clint dijo que te lo agradeciéramos.
— No sé qué hiciste para lograrlo pero qué bueno— dijo Bran feliz.

No había sido fácil. Pero ellos no lo sabrían.
Clint apareció. Se acercó inmediatamente a mí. Le dijo a los demás que nos dejaran solos. Se fueron. Lo observé.

— Hola— le dije con una sonrisa tenue.
— Ya quería verte— me dijo—. Pero he estado muy ocupado. Lo estaré toda esta semana.
— Iré contigo— dije.
— Es peligroso.
— Stefan y los demás estarán conmigo— dije.
— Aún así no quiero que te pase nada.
— Estaré bien— dije.

Se acercó y me revolvió el cabello. Aceptó. Luego se acercó a Bran y se lo llevó para alguna cosa. Los demás se acercaron a mí.

— No puedo creer que te perdieras mi pelea— le dijo Rocky a Jack.
— Me hubiera gustado verte— le dijo Jack.
— Ya será la próxima vez— dijo Rocky—. Pero puedes recompensármelo entrenando conmigo.
— Bran es mejor para eso que yo— dijo Jack—. O Stefan.

Rocky lo observó con desconfianza. Era obvio que le guardaba rencor por delatarnos. Me imaginé que Bran debía estar igual.

— Entonces será Bran— dijo Rocky—. Porque Mich quiere la revancha. Yo creo que más que recuperarse de la humillación, quiere que James lo vea ganar.
— ¿Yo?— dije.
— Sí, Milton dijo que se ha dedicado a hablar sobre ti últimamente— dijo Rocky—. Creo que está obsesionado contigo. Pero si eso te molesta, dime y lo mato.
— No tengo nada en contra de él— dije.
— Pero si da problemas dinos— dijo Jack—. Es desagradable que ande por ahí alguien que está obsesionado contigo.
— No creo que eso sea lo que esté pasando— dije con inocencia.

Ese dato era muy interesante. Demasiado.

Clint y Bran regresaron. Pude deducir que en efecto, Bran también le guardaba rencor a Stefan. Usaría eso a mi favor. Pero necesitaba que Clint y Jack no estuvieran. Hasta entonces sólo me dedicaría a ignorarlo. Pero debía romperlo antes. Así que eso haría cuando estuviéramos solos.

Después de clases Clint dijo que iríamos a su fábrica y me pareció una idea increíble. Llegamos después de un largo viaje en donde Bran no dejó de hablar como usualmente lo hacía pero esta vez Clint no le dijo que se callara. Su humor era excelente.

Rupturas de PasilloWhere stories live. Discover now