56. El diario de Zac

55 16 22
                                    

— De acuerdo— dije—. Es evidente que tenemos un grave problema de comunicación aquí.
— ¿Y qué haremos con eso?
— Hay que prometer hablar de todo— dije—. Pero de verdad, no como cuando yo te lo prometía pero seguía sin hacerlo porque ciertas cosas me resultaban vergonzosas.
— ¿Era por eso? Pensé que no confiabas en mí— dijo.
— Confío en ti— dije—. Pero hasta yo sé que es patético que no me sienta listo para nada más que no sea besarte. Porque me gusta hacerlo. Quizá te hice pensar que odiaba todo pero no es así, de verdad me gusta... simplemente no me siento lo suficiente seguro... Alex piensa que quizá no confío en mí en ese aspecto, realmente no sé porqué no puedo... pero creo que es algo que puede cambiar...
— Quizá sólo necesitas acostumbrarte más a mí— dijo.
— Tal vez— dije—. Pero no lo haré si te alejas de mí totalmente.
— ¿Y si un día mi cerebro se deja llevar y termino tocándote más de la cuenta? ¿Y si eso te asusta tanto que te lo arruino para siempre?
— No pasará, te avisaré— dije—. Podemos hablarlo, ¿No? Además, ¿Por qué te dejarías llevar? ¿Eso se puede?

Me miró sorprendido.

— No podría explicarte porqué pasa aunque quisiera— dijo.
— ¿Qué significa, tan estúpido crees que soy que no puedes decírmelo?
— No es eso, simplemente no creo que puedas entenderlo.
— Definitivamente piensas que soy estúpido— dije ofendido.
— Bien, te explicaré pero si te asusta es tu culpa.
— Adelante.

Lo pensó un poco.

— Tú me gustas mucho— dijo—. Creo que eso ya lo sabes, ¿No?
— Aún estoy tratando de creérmelo. Parece demasiado bueno que el doctor Harper, que tiene muchas doctoras y enfermeras admiradoras me quiera a mí.
— No son admiradoras, son amigas.
— Como sea— dije—. Debes aceptar que le gustas a muchas personas.
— ¿Y qué hay de ti? Jason y Lou dicen que eres muy popular. Te conocen en las dos universidades.
— Pero es porque piensan que soy el hermano de Lou... aunque una chica me invitó a salir el otro día...
— ¿Qué?— dijo sorprendido.
— Pero la rechacé— dije—. Y fui tan amable que se fue feliz. No soy completamente inútil en ese sentido. Lo admito, soy muy torpe en cosas que tienen que ver con sentimientos pero he cambiado.
— Sin embargo no puedes entender por qué para mí me es difícil controlarme cuando estoy contigo.
— Es porque te gusto mucho, ¿No?
— ¿Ahora sí lo crees?
— Deseo creerlo. Porque rechacé a alguien por ti, es lo menos que puedo hacer.

Soltó una risita extraña.

— Quizá yo también debería empezar a creerlo de verdad— dijo de mejor humor.
— Deberías— dije—. Porque es cierto. Antes de ti no me gustaba que nadie se acercara siquiera. No me imaginaba queriendo besar a alguien. Pero ahora lo hago. Y me gusta. No sé por qué soy tan diferente pero sí sé que gracias a ti he cambiado mucho y cada vez me asustan menos cosas. Quizá llegue un momento en mi vida donde nada me de miedo. Pero no lo sabremos si hacemos todo un drama cada vez que no concordamos en algo.
— ¿Significa que piensas que quizá en algún momento tú y yo...
— ¿Eso de verdad significa tanto para ti?
— No realmente... pero me gustaría que pasara.
— Suena a que confías mucho en ti en ese aspecto.
— Lo hago— dijo muy seguro—. No es por presumir pero... sé cosas.
— ¿Y de verdad piensas en mí así? Porque sabes que no es falta de autoestima, generalmente me siento infinitamente mejor que todo el mundo pero... me cuesta verme atractivo. No sé qué parte de mí podría ser medianamente interesante.
— Eso no es lo que diría alguien popular.
— No sé siquiera por qué soy popular— dije—. Creo que es porque soy amable...
— De verdad he fracasado como novio— dijo—. No creí que fuera tan grave... no puedo creer que no te consideres a ti mismo atractivo. ¿Por qué? Tenemos tantos espejos en la casa... y tú escogiste la mayoría...
— ¿Por qué todos me dicen eso?
— Porque es obvio que eres atractivo. Siempre lo has sido. Es decir, me enamoré de ti por muchas razones más allá de cómo te ves pero... eso también influyó mucho... no soy alguien superficial pero... quizá sí lo soy un poco pero no me siento mal por eso. Me siento atraído por ti en todos los sentidos y no tengo por qué negarlo.

Rupturas de PasilloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora