Hannigram - Cortos -

La consulta de Hannibal

#Hannigram #relatocorto #Hannibal #WillGraham

🔥 La consulta de Hannibal 🔥

Si se paraba a pensarlo Will no tenía la respuesta. ¿En qué momento las sesiones habían derivado en esto?

El hombre bajo su toque le coge de la muñeca ante una de las tantas embestidas que el sofá de su consulta ha sido testigo. Susurra su nombre.

Hannibal.

Como se hacen las buenas cosas, Will se había enamorado de Hannibal a fuego lento. Sabe que el psiquiatra le ha guiado hacia estos momentos casi desde el principio cuando, según sus palabras, la oruga dentro de la crisálida gritaba por salir al mundo.

¿Cuál fue el momento exacto? Tal vez, el día que fue a verlo tras besarse con Alana. Quizá el día que vió cómo le salvaba la vida a aquel tipo de la ambulancia. Estaba tan seguro de sí mismo que Will no pudo evitar la erección en su pantalón mientras lo miraba. Joder, nota su polla durísima solo de pensarlo mientras sigue embistiendo a Hannibal.

- No pares - le pide Hannibal, todo sudor y gemidos.

Will sabía que Hannibal se había enamorado de él casi desde el principio. Curiosidad, le llamó entonces. Tan rápido que le sorprendía, ¿era posible enamorarse así de una persona?

La consulta del psiquiatra se había convertido en el altar donde los dos hombres se desnudaban, almas y corazones incluidos. Hannibal siempre tenía en la punta de su lengua una frase y Will, bueno, Will todas esas palabras las guardaba en su corazón. Sentir algo por primera vez provoca una lucha interna donde tienes ganas de gritar, llorar, sonreír y golpear algo al mismo tiempo. Euforia. Miedo. Deseo.

- Will...

Su nombre tantas veces escuchado en sus labios. Will, ven, quiero mostrarte algo. Will, te deseo. Will, estoy aquí. Will, confía.

¿En qué, se preguntaba?

Will estuvo con varios hombres tiempo atrás, nada como esto. Hacía tantos años que los recuerdos se mezclaban en su mente y, probablemente, los hacía más agradables de lo que en realidad fueron. Con Hannibal Will había abierto ese mundo de nuevo y lo que había encontrado le sorprendía. Era puro fuego.

- Joder - dice el perfilador, sus manos apoyadas en el pecho de Hannibal mientras sus movimientos son cada vez más rápidos y certeros. 

- Tócame.

Hannibal guía la mano de Will hacia su polla porque sabe que va a correrse enseguida. Y Will la toma con la misma delicadeza de siempre, como si acaso fuese a romperse, como si fuese la primera vez, sin dejar de moverse en su interior.

Haría cualquier cosa por él. Había hecho muchas cosas por Will, la mayoría indecentes a ojos de los demás. Ojos que, por supuesto, a Hannibal no le importaban lo más mínimo. Will era suyo y para hacerlo valer era capaz de todo.

- Vengo, joder - Will agarra el muslo de Hannibal con su mano libre, encima de su hombro, y empuña al hombre hasta el Fondo mientras todo su semen lo marca una vez más.

La mano que masturba a Hannibal se vuelve más dura. Siempre le ocurre llegado el momento. Le encanta llegar casi a la vez, como si los dos hubiesen adquirido el mismo pasaje a ese lugar que Will llamaba Cielo y Hannibal llamaba Infierno.
Se corre manchandolo todo y en estos momentos Will se enamora si acaso un poco más.

La frase en la punta de su lengua olvida el miedo.

- Te amo - le dice al más joven.

Las palabras en el corazón de Will, siguen temerosas. Se deja caer sobre Hannibal y se deja abrazar mientras recibe un amor que no cree merecer.

Y Hannibal espera. No le importa, ya esperó por él hasta que Will fue capaz de comprender. Estará aquí si acaso un día decide ir más allá de esto, si decide confiar. Hannibal es piedra firme.

¿Qué hay más paciente que eso? ❤