El anillo de mi dedo anular

CXXXIX

— ¿Rennie? —Llamó Nana después de varios segundos de silencio.

— No importa, de todas maneras... si lo está no hay nada que yo pueda hacer. Igual es mi marido.

— Exacto, pequeño, tú eres quien tiene el anillo. —Ren lo miró no muy conforme con esa respuesta.

— Yo no creo que Minhyun sea de los que se casan con alguien amando a otra persona, no tiene motivos para hacerlo, si amara a alguien más creo que simplemente no se hubiera casado contigo.

— Es que creo que la otra persona no sería aprobada por sus padres.

— Pero tú estás enamorado de él, y la manera en que te trata, en que te mira... por favor, eso no puede ser fingido, tú le gustas.

— He pensado que todo es efecto del karma. —Nana y JR lo miraron aún más confundidos. — Ya saben, lo que le haces a una persona regresa a ti. Creo que tuve a Minhyun con muchas dudas desde que nos conocimos hasta ahora, tal vez es por eso que ahora me siento así.

— No, no, no, no. Ren, no confundas el karma con la sospecha de que él ame a alguien más. Eso no es karma.

— No lo sé. Quizá.

— Pues vamos a preguntarle, Nana y yo te acompañamos por si pasa lo peor, pero yo no creo que sea así.

— No. No le diré nada.

— ¿Cómo saldrás de dudas entonces?

— No lo sé. Creo que simplemente no quiero saberlo, si sí o si no, me da igual, es mi marido y voy a quedarme a su lado pase lo que pase.

— Lo dices como si fuera tu obligación, pero si no va a haber amor entonces no funcionará su matrimonio.

— "Es lo mismo que decían mis hermanas." Hay amor, tal como lo dijiste JR, él no finge, ha sido así conmigo siempre, pero tal vez es un amor menor que el que siente por esa otra persona... "y me duele que sea así, pero lo acepto" no voy a echarme para atrás.

— No puedes aceptar las cosas a medias, Ren, es todo o nada.

— Yo no renuncio a las cosas así, a veces puede parecer que huyo, pero sólo es un parecer. "Además, él estuvo conmigo cuando yo no sentía nada por él, Yo puedo estar con él porque sé que me ama... o al menos me quiere." —Los dos jóvenes a su lado guardaron silencio un momento.

— Bien, —Fue JR el primero en hablar. — bien, si esa es tu decisión.

— Sí, esa es.

— ¿De verdad crees que pueda estar enamorado de alguien más?

— No lo sé. "Sí, estoy 90% seguro." —Nana se llevó las manos a la cintura y de pronto una idea llegó a su mente. Tronó los dedos captando la atención de los dos chicos.

— Se me ocurrió algo.

— ¿De qué se trata? —Hablaron los dos y se miraron unos segundos soltando una leve risa.

— Minhyun es tu esposo, ¿verdad?

— Sí. —Miró el anillo en su dedo anular. — Lo es.

— Entonces, si crees que él está enamorado de otra persona estando casado contigo, ¿por qué no te haces tu lugar?

— No comprendo.

— Yo sí, Nana eres una genio.

— ¿Pueden explicarme? Realmente no entiendo.

— Me refiero a que lo conquistes.

— ¿Mi lugar?

— No. —Rió. — A minhyun.