CLXVI

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Cuando Ren abrió los ojos lo primero que hizo fue mirar alrededor sin siquiera sentarse, se familiarizó una vez más con todo lo que había en esa habitación y todo lo sucedido la noche anterior volvió a su mente como una ráfaga del viento frío que soplaba afuera.

El ligero sonido de la lluvia fue lo único a lo que le prestó atención durante unos minutos antes de por fin sentarse y ponerse de pie, frotó sus ojos y peinó su cabello con sus manos.

La habitación sólo estaba iluminada por una lámpara de noche; miró a la cama de arriba y notó a JR aún durmiendo por lo que prefirió no encender la luz ni hacer mucho ruido; tomó su mochila y se acercó a la lámpara para buscar lo que necesitaba. Salió de la habitación siendo envuelto esta vez por la oscuridad del departamento, al parecer Jaehwan tampoco estaba despierto, así que hizo menos ruido y entró al baño, encendió la luz y comenzó a prepararse: se cambió el pijama, se peinó, maquilló y suspiró con un poco de nostalgia antes de volver a salir.

- Oh, Ren, buenos días. -Saludó Jaehwan que recién salía de su habitación.

- Buenos días, Jaehwan. ¿Dormiste bien?

- Sí, ¿y tú?

- También, gracias.

- Veo que ya estás listo, dame veinte minutos.

- Está bien. ¿Puedo preparar té?

- Seguro. Hay diferentes en la alacena, la tetera está del lado izquierdo.

- Vale. -Jaehwan entró al baño y Ren se dirigió a la cocina, puso la tetera al fuego y volvió a la habitación, nuevamente, cuidando hacer el mínimo ruido buscó en su mochila y sacó su cuaderno y su cartera; por primera vez saldría sin su mochila ya que no quería pasear de un lado a otro todo lo que llevaba ahí, volvió a salir y regresó a la cocina justo antes de escuchar la tetera comenzar a silbar.

Pasaron varios minutos y un par de tazas de té antes de que Jaehwan entrara a la pieza después de dar los buenos días a JR en el pasillo.

- Ya estoy aquí. ¿Qué quieres desayunar? -Dijo y comenzó a revisar el refrigerador.

- "En realidad no tengo hambre."

- Parece que sólo tenemos kimchi y... kimchi... -Sacó un recipiente con el kimchi y lo puso a un lado de la estufa. - Tenemos que comprar la despensa.

- Puedo hacerlo. -Ofreció con una taza de té para el otro.

- ¿Seguro? -Recibió la taza. - Gracias.

- Sí.

- Genial. -Dio un trago al té. - Mmm, está buenísimo.

- Gracias.

- En ese traste hay galletas, pásalo para acá. -Indicó y Ren obedeció. - JR vendrá en un momento. Voy a preparar el arroz y... después de desayunar tú y yo nos vamos. -Tomó una de las galletas y la mordió mientras ponía una sartén en la estufa.

- De acuerdo.

- Prueba las galletas, a mí me parece que son deliciosas.

- Okay, gracias. -Tomó una galleta y la mordió. - Está rica.

- ¿Verdad que sí? -Ren asintió y habló con Jaehwan durante un rato más hasta que el el segundo apagó la estufa. JR entró poco después, justo cuando el desayuno estuvo listo.

- Buenos días. -Saludó con su acostumbrada sonrisa carismática.

- Buenos días. -Saludaron los otros dos al mismo tiempo.

- ¿Qué tenemos hoy para desayunar?

- Kimchi y arroz, ah, y Ren preparó té.

- ¿Es día de despensa? -El rubio sirvió una taza de té para JR y se la ofreció siendo recibida de inmediato. - Gracias.

El anillo de mi dedo anularHikayelerin yaşadığı yer. Şimdi keşfedin